Altea tiene un nuevo Juzgado de Paz. Esta semana han entrado en funcionamiento las instalaciones judiciales que se encuentran en los bajos del Mercado Municipal situados en el Pasatje del Llurador, inmueble de propiedad municipal que recuperó el Ayuntamiento de Altea el pasado 6 de febrero después de haberlos utilizado la Cooperativa Agrícola de Altea desde 1970 mediante un convenio con el consistorio. El retorno a la propiedad municipal se formalizó con la firma del acta de entrega amistosa suscrita entre el alcalde de Altea, Jaume Llinares, y el presidente de la Cooperativa Agrícola de Altea, Francisco Devesa, mediante un convenio que establece las bases para la colaboración entre el Ayuntamiento y la Cooperativa para compensar la deuda producida por el uso de esta de los locales comerciales desde la firma de la escritura de rescate de dichos inmuebles en 2007. Y a mediados de marzo se iniciaron las obras de acondicionamiento a cargo de la Empresa Pública Municipal (PDM) para adecuar las instalaciones a las necesidades del juzgado.
Las anteriores instalaciones del Juzgado de Paz de Altea se ubicaban en la calle La Mar, frente a la entrada de vehículos aledaña a la estación del TRAM. Las condiciones de accesibilidad eran bastante deficientes al estar en un sótano sin ascensor, además de otras carencias que se han solucionado con el nuevo Juzgado que, ahora, está en pleno centro urbano y a pie de calle, lo cual "supone acercar la administración a la ciudadanía", según señaló este jueves el alcalde de Altea.
Llinares señaló que "era una prioridad para el equipo de gobierno su cambio de ubicación porque el Juzgado de Paz merece unas instalaciones más dignas y al alcance de todos los alteanos", por lo que se celebró un pleno de la corporación municipal en mayo de 2018 " donde se aprobó, con la mayoría de los grupos del equipo de gobierno (Compromís, PSPV-PSOE y Altea amb Trellat) y la abstención de PP y CIPAL, la recuperación de los locales de dominio público situados en el semisótano anexo al Mercado Municipal, propiedad del Ayuntamiento de Altea y ocupados hasta febrero pasado en precario por la Cooperativa Agrícola desde 2007, cuando el convenio había terminado", afirmó el alcalde.
Las obras de acondicionamiento del nuevo Juzgado de Paz han consistido en dotarlo de todos los requisitos de accesibilidad y remodelar el inmueble para disponer de una sala de vistas, un archivo y despachos para el juez, el secretario, y una zona de trabajo para las tramitadoras. Además, las instalaciones cuentan con un baño para los usuarios y se ha adaptado otro para personas con movilidad reducida.
