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Antonio Mayor: «Benidorm puede sobrevivir en invierno sin las plazas del Imserso»

El presidente de Hosbec cree que las condiciones económicas del programa son «ofensivas» y defiende el plante de los hoteleros que han impugnado el pliego redactado por el Gobierno y piden suspender la licitación

Turistas de la tercera edad, cargados con maletas, a las puertas de un hotel de Benidorm que trabaja habitualmente con el Imserso. david revenga

«Nos tienen a pan y agua, y con cada concesión que hacen a cuatro años nos quitan un trozo de pan, otro trozo de pan... Pero ya está bien». El presidente de la patronal turística Hosbec, Antonio Mayor, defendió ayer el plante de los hoteleros al Programa de Vacaciones Sociales para Mayores del Imserso, como señal inequívoca de su disconformidad con las condiciones económicas impuestas por el Gobierno en el nuevo pliego de condiciones. El documento, lejos de atender la subida de tarifas que el sector viene reclamando desde hace años, ha llegado a proponer incluso rebajas de hasta el 12% en el precio final que pagarán los usuarios por sus vacaciones y otros ajustes económicos frente a los que los hoteles han dicho «basta».

Hosbec, como principal asociación hotelera de la Comunidad, se ha unido a la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (Cehat), donde también están representadas otras agrupaciones empresariales, como la de la de Empresarios Hoteleros de la Costa del Sol (Aehcos), para presentar ante el Tribunal Económico Administrativo una impugnación a los pliegos de cláusulas y prescripciones técnicas, que ya es oficial desde ayer y en la que reclaman la suspensión de esta licitación. «El sector hotelero no ha podido admitir unos pliegos que lesionan de una forma importante los intereses de las empresas hoteleras y de los trabajadores que participan en este programa»: 65 hoteles y 3.000 empleos directos en la Comunidad Valenciana, con Benidorm como principal destino, con un total de 38 establecimientos; 350 hoteles y 12.000 empleados en el conjunto de España.

¿Cuál es el objetivo de este recurso? En palabras de Toni Mayor, esta impugnación por parte del sector es su forma de expresar que no seguirán aceptando las espartanas condiciones que les viene imponiendo el Imserso desde hace años: «Estamos plantándonos. El recurso no es más que una forma de decir: 'Ya está bien'. El Imserso nos hace perder dinero. Hasta ahora nunca habíamos hecho algo así, pero ya es tal el arrinconamiento y el menosprecio que nos tienen que hay que tomar la determinación de plantarnos, pase lo que pase», explicó ayer el presidente de la patronal.

Ahora bien, aunque los hoteleros de Benidorm y la Costa Blanca prefieren tener un año de margen con el actual contrato prorrogado para poder negociar una mejora en las condiciones, también son conscientes de que en este plante y la hipotética suspensión del programa jugarían con ventaja frente a otros destinos: «Benidorm puede sobrevivir al invierno sin problemas si no hay Imserso. Otras zonas de España, como en Cataluña o Mallorca, es verdad que podrían pasarlo mal o que no tendrían la misma ocupación que tienen con este programa, pero nosotros no tenemos problema. La gente cuando acaba el Imserso sigue viniendo igual a Benidorm y, de la otra manera, los hoteles tendríamos más libertad para operar. Así que si el Imserso desaparece, pues que desaparezca», agregó Toni Mayor.

Perjuicio económico

Como ya avanzó ayer este diario, cada día de retraso en la llegada de turistas por medio de este programa vacacional podría causar a los hoteles de la Costa Blanca que tiene sus plazas contratadas con el Imserso pérdidas de hasta 100.000 euros diarios. De no existir estos contratos, los hoteles podrían reservar las camas y trabajar por su cuenta, además de fijar los precios sin tenerse que ceñir a las ajustadas tarifas impuestas en este plan: 22,10 y 22,50 euros por día y turista alojado, en régimen de pensión completa con vino y animación.

Entre las causas en las que los empresarios turísticos sustentan su recurso contra los pliegos figuran deficiencias de tipo económico, técnico y justificativo. Por ejemplo, que no se tengan en cuenta los convenios colectivos en el sector de la hostelería ni las tablas salariales que en ellos se recogen. En este sentido, como explicó este diario, un estudio de Hosbec desvela que con las condiciones económicas en este documento, muchos establecimientos ni siquiera podrían hacer frente a los costes laborales de su plantilla.

Tampoco se recogen mejoras en las tarifas o se exige a los establecimientos requisitos obligatorios como disponer de animación, medico y ATS o una nevera para medicamentos, cuyos costes no se han cuantificado, tal y como denuncian desde la patronal.

Los empresarios han venido exigiendo desde hace años incrementar el precio final que éstos perciben a 25 euros por cada cliente y estancia. «No estamos pidiendo la luna, son 25 euros, que si les quitas el IVA se quedan en 22,5 euros. Es ofensivo que desde el Gobierno den por bueno que el precio de un hotel de cuatro estrellas sean 20 euros cuando el sector está haciendo un esfuerzo inversor impresionante», defendió Mayor, para quien tampoco es aceptable que, en el lado inverso, «nos exijan turismo de calidad, subir salarios, mantener un número determinado de trabajadores, cuando económicamente nos están ninguneando de una manera que clama al cielo». Por todo ello, Mayor consideró que, si bien hasta ahora los hoteles «somos los que hemos estado subvencionando este programa, ya está bien de hacernos perder dinero».

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