Una inundación en el CEIP María Francisca Ruiz Miquel, también conocido como CEIP La Torreta, de La Vila Joiosa ha obligado a suspender las clases este lunes para Primaria. Al parecer, la rotura de un latiguillo de uno de los baños de la primera planta del edificio provocó una acumulación de agua en el falso techo de la planta baja que ha acabado cediendo sin causar heridos.

Según explicaron desde la Dirección del centro escolar, el agua "ha estado saliendo durante todo el fin de semana" y cuando han entrado este lunes al colegio "nos hemos encontrado que había caído el techo y agua por todas partes". Así, han decidido suspender las clases en Primaria en la jornada de hoy aunque los alumnos de Infantil sí han acudido al centro ya que esa parte del inmueble no estaba afectada.

El agua ha afectado a una de las aulas polivalentes del centro donde ha cedido parte del techo así como a la entrada principal del edificio. Durante la jornada de hoy, según explicó el alcalde Andreu Verdú, han acudido al colegio los servicios técnicos así como miembros de la Inspección Educativa y peritos del seguro para comprobar los daños ocasionados. Ahora, habrá que hacer una "valoración" sobre las intervenciones que habrá que realizar para reparar estos espacios, según la Dirección del CEIP.

"Por una parte menos mal que no ha pasado nada porque no había nadie en el centro. Por otra, debe haber estado cayendo agua todo el fin de semana y si hubiera habido alguien lo hubiera visto antes", afirmaron las mismas fuentes. Así, el agua afectó también a la instalación eléctrica que este lunes ha permanecido desconectada. Y es que, a mediodía, "aún está cayendo agua en la entrada".

El centro permanecerá cerrado hoy y parte de los 350 alumnos que acuden al mismo no han iso a clase. En principio, mañana está previsto que se retomen las mismas. Con todo, según añadieron las mismas fuentes, la zona afectada de la entrada y el aula afectada quedará acordonada para evitar el paso.

No es el primer incidente que se produce en el CEIP La Torreta en los últimos meses. En diciembre, un robo en las instalaciones educativas obligó a suspender las clases y cerrar el centro. En esta ocasión, los presuntos ladrones se llevaron todos los ordenadores.