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Objetivo del PSOE: ganar dos concejales y gobernar con 9

Rubén Martínez relega a Cristina Escoda al cuarto puesto en favor de Paqui Gómez, su «apuesta personal» y afirma que la candidatura socialista es «sólida» y está «unida»

El candidato Rubén Martínez, flanqueado por Bernardo Mira y Cristina Escoda, ediles y coordinadores de la campaña del PSOE. DAVID REVENGA

Lejos de aspirar a la mayoría absoluta con la que soñaban los grandes partidos en otros tiempos, el candidato socialista a reconquistar la Alcaldía de Benidorm, Rubén Martínez, se conforma el 26 de mayo con ganar dos ediles. Dos concejales que añadir a los siete con los que se ha mantenido estos cuatro años en la oposición y que, según sus cuentas, le permitirían sumar un total de 9 y arrebatar la vara de mando al popular Toni Pérez, que gobierna desde 2015 con ocho de los 25 ediles que tiene la corporación y con diez desde que los dos de CBM se sumaron a su equipo en 2017. «Para nosotros los puestos de salida son del uno al nueve», se cansó ayer de repetir durante la rueda de prensa que ofreció para presentar y valorar la lista. Ojo: la mayoría absoluta está en el 13.

Visto así, el ahora portavoz y secretario general de los socialistas parece ponérselo fácil a su máximo rival electoral -se conforma con poco- y dar por hecho ante el resto de grupos al margen del PP su disposición a pactar -si quiere gobernar con tranquilidad y no en minoría-.

Sin embargo, a pesar de que sus aspiraciones no parecen apuntar a la luna, sino a un espectro mucho más terrenal, tampoco Martínez se cansó ayer de repetir que su partido ha aprendido de «los errores del pasado» y es el único capaz de mejorar esta ciudad. Y lo hizo sin avanzar propuestas -al margen de la ya anunciada el martes supresión de la zona azul de la avenida de Foietes-, sino vendiendo su lista como un «equipo ganador» y lleno de renovación, pese a que en los siete primeros puestos repiten cinco de los actuales concejales: el propio Rubén, que concurre por tercera vez a las elecciones, la primera como número 1; Cristina Escoda; Bernardo Mira; Tere Águila y Conrado Hernández.

Las caras nuevas

El cabeza de cartel en el apartado de renovación dentro del partido es Paqui Gómez, directora del colegio Leonor Canalejas de Benidorm y, como Martínez definió ayer, su «apuesta personal» en este proceso. Vinculada al proyecto educativo de los socialistas locales, con quienes lleva colaborando desde 2015 pese a no militar en el partido, el alcaldable ha puesto sobre sus hombros la importante labor de «aportar frescura a la lista». O, dicho de otra manera, de mostrar una cara nueva que, a la vez, atraiga a un nuevo cupo de votantes.

Por eso, pese a quedar en cuarta posición en el proceso de elección interna de los militantes, el secretario general decidió la noche del lunes adelantarla dos puestos y relegar al número 4 a Cristina Escoda, ya veterana en las lides electorales pese a su juventud, en lo que ambos aseguraron ayer que se trató de una decisión consensuada. «Los resultados electorales no van a cambiar, no es que Paqui vaya a aportar una gran diferencia de votos, pero se trata de una persona que no milita, que ha hecho muchas cosas por Benidorm y que quiere estar en este proyecto. Y eso se debe premiar», expuso Rubén Martínez.

El segundo que ha conseguido colarse en esta lista de renovación, a base de mucho esfuerzo y empeño, es Dani Luque, policía local y presidente de la Associació de Penyes el pasado 2017. En su caso, pese a que por primera vez ocupará un puesto de salida más que probable de cara al 26M -va de 5-, se trata además de un militante con amplia trayectoria dentro del partido a nivel orgánico y con una amplia cuota de reconocimiento social, gracias en parte a su fuerte vinculación con el mundo festero.

Los dos restantes hasta alcanzar el noveno puesto, donde los socialistas aspiran a llegar, son Ana Cañadas y José Enrique Ripoll, como Dani Luque, afiliados de amplio recorrido dentro de la agrupación socialista y a los que, según el candidato, en este 2019 «les ha llegado su oportunidad».

La victoria del aparato

Si algo han dejado claro las primarias internas para la designación de la lista celebradas por el PSPV benidormense el pasado domingo es que, a diferencia de lo que ha ocurrido en otras poblaciones, aquí se ha impuesto más que en ningún otro lugar lo que en el fango político se conoce como «el aparato». Que se lo expliquen si no a algunos de los nombres que, avalados por su peso en movimientos vecinales, sociales o de extranjeros, aspiraban a convertirse en los nuevos «mirlos blancos» y se han acabado dando de bruces con ese aparato. Carolina Cutillas, en el puesto 18, o la británica Karen Cowles, en el 12, son algunos ejemplos.

Y lo mismo ha ocurrido con algunos de los afines al exalcalde Agustín Navarro, que no repetirá pero que tampoco ha podido colocar en lo que ahora serían claros puestos de salida a dos de sus grandes colaboradores: Mari Luz Navarro, que irá de número 10, y Miguel Soldevila, en el 11.

«Aquí no hay familias, no hay bloques enfrentados. Somos una candidatura unida y sólida como la que más», insiste en repetir Rubén Martínez. La realidad en lo primero parece decir lo contrario. En lo segundo, ahora tendrán de demostrarlo. Arranca la carrera electoral.

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