Color y mucha purpurina además de disfraces imposibles. Un año más el carnaval llenó de embrujo las calles de los municipios como Muro y Benidorm donde los desfiles de disfraces reunieron a miles de personas en las calles.

En el municipio murero, más de 2.000 personas formaron parte de la comitiva que recorrió las calles La Bola, Sants de la Pedra, Placeta Molina y plaza de la Iglesia hasta llegar al Matzem.

Los participantes, en su mayoría mureros pero también vecinos de otras poblaciones de El Comtat y l'Alcoià, se lo pasaron en grande en este pasacalle que contó con el ritmo de batucadas y dieciocho puntos de música, de coreografías por parte de grupos de baile de la localidad y de música pop.

Más de 800 personas estaban inscritas en el concurso, así que un jurado examinó con detenimiento los disfraces que lucían para luego otorgar los premios del certamen. El Matzem fue el escenario de final de fiesta donde, al cierre de esta edición, una discomóvil amenizaba la celebración de esta festividad. En el desfile también se pudieron apreciar catorce carrozas de diversidad de temáticas que hicieron aun más vistosa esta tradicional cabalgata del Comtat.

La edil de Comunicación, Carolina Iváñez, indicaba que «estamos muy contentos porque se ha superado la participación respecto al año anterior, esto indica que el carnaval murero sigue siendo una cita obligatoria para la comarca en el calendario festivo».

Más disfraces

En Benidorm la fiesta tampoco defraudó. El desfile de carnaval adulto congregó a más de 1.000 participantes de las diferentes peñas que participaron en el concurso llegando a casi 80 inscritas. Entre los disfraces se pudieron ver mariposas, superhéroes o personajes de películas, entre otros.

Algunos de los más llamativos fueron los artesanales que dejaron con la boca abierta al numeroso público que se repartió por el trayecto hasta la plaza de SSMM Los Reyes de España y que recorría las calles Venus, Ruzafa, Herrerías y la plaza del Doctor Fleming hasta el Ayuntamiento donde esperaba el jurado. Para terminar la velada, música en la plaza.

Los más pequeños también tuvieron su desfile.