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Caos en la puesta en marcha del control de accesos al casco antiguo de La Vila

Los vecinos muestran su desconcierto ante las instrucciones para darse de alta para seguir accediendo en coche

Caos en la puesta en marcha del control de accesos al casco antiguo de La Vila

Vecinos que residen en el extranjero y que no pueden hacer el papeleo; otros que han acudido cuatro veces a darse de alta sin recibir aún respuesta o plazos que se agotan sin tener claro cuál es el procedimiento para dar de alta un vehículo. El control de accesos al casco antiguo de La Vila Joiosa parece que se atasca y que está siendo un auténtico quebradero de cabeza para los residentes de este barrio del municipio. La razón: unos plazos y unos trámites con los que los residentes no acaban de aclararse por lo que, sobre ellos, pesa la incertidumbre de si podrán dar de alta sus vehículos sin problema para poder seguir accediendo a sus viviendas.

El control de accesos del casco antiguo de La Vila pretende ser el sistema con el que el Ayuntamiento borre del mapa la circulación de vehículos por estas estrechas calles históricas; o al menos, deje esta presencia en la mínima expresión. Para ello, y tras años de anuncios desde 2016 que no se traducían en la puesta en marcha de este sistema, el actual equipo de gobierno (PSOE-Gent per La Vila y EUPV) anunciaba en el mes de septiembre que esta regulación controlada por semáforos y pivotes iba a ser una realidad una vez que se aprobara y publicara la Ordenanza municipal.

Lo cierto es que esa norma se aprobó definitivamente en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) a finales de noviembre. Aunque solo un mes después se volvió a publicar la misma en el boletín provincial para corregir los errores detectados, entre ellos, según las fuentes consultadas, porque el mapa que marcaba los puntos no estaba correctamente hecho.

Desde ese momento, solo un bando municipal el pasado mes de febrero informaba a los vecinos de los pasos a seguir para poder lograr una autorización del Ayuntamiento para entrar con su vehículo a este conjunto histórico que está declarado como Bien de Interés Cultural (BIC).

Ese bando marcaba como plazo límite ayer, 1 de marzo, para presentar esas solicitudes, lo que provocó entre los vecinos algo de malestar. «Ese plazo es contrario a la ordenanza ya que no puedes ponerle un tope a los residentes», explicó a este diario uno de los afectados. Pero además alegaron que en ese escrito del alcalde, Andreu Verdú, también se recogía que la única forma era «de forma electrónica» algo que también creó desasosiego entre los residentes ya que «muchos de ellos no saben hacerlo telemáticamente». Con todo, la única afirmación del bando que los dejó un poco tranquilos fue que «el régimen sancionador no se aplicará hasta el 1 de junio de 2019», por lo que tienen un espacio de tiempo para ir acostumbrándose. A pesar de esta cuestión, «los vecinos tienen la duda de si se les va a multar».

Sin embargo, a la hora de darse de alta las cosas son diferentes. «Nos dicen que el plazo del 1 de marzo solo era como una primera fase», es decir, que a partir de ese momento podrán seguir dando de alta vehículos. Por tanto, «no entendemos por qué pusieron esa fecha», afirmó otro de los residentes. Además, algunos apuntan a lo «complicado» para darse de alta. «He ido cuatro veces y no he conseguido nada y ni me han contestado». Quienes han mostrado más preocupación son los residentes extranjeros. Han de estar empadronados además de presentar la ITV y el seguro del vehículo, por lo que temen «que no les sirva lo suyo».

Sin control

Lo cierto es que aunque la ordenanza está en vigor y que se ha colocado alguna señal en la zona de acceso desde la playa en el mes de enero, desde la calle Mayor nada hace sospechar que habrá un control de acceso. Es más, «el semáforo que pusieron y lleva dos años en rojo ahora está apagado»; una luz que hasta hace unos meses también sembraba la duda de si al entrar, los conductores serían multados. Pero los residentes además afirman que «no hay ningún control porque incluso se ven más vehículos en el casco antiguo que hace un año».

Desde la Asociación del Casco Antiguo recuerdan que siguen pendientes de una reunión con el Ayuntamiento para que les informe sobre este sistema. Un encuentro que pidieron hace meses y aún no se ha celebrado. Con todo, este diario se intentó poner ayer en contacto con la Concejalía delegada para saber las razones de este retraso en la puesta en marcha sin éxito.

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