Nueva ronda de preguntas sobre el expediente de la estación de autobuses de Benidorm, uno de los más polémicos que atesora en el Ayuntamiento de la ciudad turística. El turno de palabra llegó ayer al exconcejal del PP Francisco Saval, quien fuera concejal popular de Hacienda durante la etapa en la que se firmó la hipoteca con Enrique Ortiz para levantar el complejo y también cuando se rubricó el controvertido «papelito» que dio origen a la citada comisión política después de permanecer oculto durante prácticamente una década. Pues bien, ayer Saval dio un nuevo titular: «todos los ediles de su gobierno sabían de la existencia de este papel».
Así lo confirmaron diferentes fuentes asistentes a la comisión política que ayer terminó con reproches por parte del secretario municipal, como pudo saber este periódico. De hecho, el máximo responsable de velar por la legalidad jurídica municipal pidió al término de la reunión la paralización de este órgano ya que, a su juicio, se estaba trascendiendo el objeto de la comisión: el «papelito» de Ortiz.
Un documento que, según palabras de Saval, conocían todos los miembros de su gobierno, liderado por el popular Manuel Pérez Fenoll, que contaba entre sus filas con el actual alcalde de Benidorm, Toni Pérez, y el ahora portavoz del ejecutivo municipal, José Ramón González de Zárate. Cabe recordar que fue hace unos meses cuando el paradero de este documento se convirtió en toda una incógnita. En ese escrito, el empresario Enrique Ortiz aceptaba en 2008 que, en caso de una rescisión del contrato por la estación de autobuses, fuera la próxima empresa concesionaria de la instalación la que le indemnizara por los daños y perjuicios derivados de no poder explotar esta infraestructura durante los 40 años estipulados en el convenio.
Unos años más tarde, los tribunales obligaron a rescindir el convenio por los excesos urbanísticos y el punto de la indemnización fue uno de los grandes escollos en las negociaciones entre el Ayuntamiento y Ortiz para dar por finiquitado el contrato. De hecho, la estación sigue en manos del controvertido constructor. De ahí que la recuperación de este «papelito» fuera clave para algunos grupos de la oposición. Finalmente, el documento apareció en el «armario de las cosas raras» del área de Intervención y, fue entonces, cuando los grupos de la oposición solicitaron la creación de una comisión política ex profeso para investigar cómo y cúando llegó el «papelito» a ser cerrado bajo llave en un armario.
Saval admitió ayer que todos los miembros de su gobierno sabían de existencia de ese «papelito». Además, el que fuera edil de Hacienda entre 2007 y 2009 defendió su gestión al frente de este controvertido expediente al señalar que autorizó el aval de la hipoteca para levantar la estación de autobuses porque contaba con todos los informes técnicos favorables.
Fue en este punto donde surgieron las tensiones sobre si el tema era o no objeto de la comisión política ya que, en estos momentos, la concesion de ese aval es uno de los temas que está siendo investigado por la Fiscalía. El presidente de la comisión, Juan Balastegui, señaló que la comisión sigue hacia adelante aunque admitió que mantendrá una reunión con todos los grupos para reconducir el objeto de la comisión.
