La Guardia Civil busca a dos hombres por una presunta agresión sexualubicado en La Vila Joiosa, ocurrida en uno de los caminos cercanos al centro que trabajadores y usuarios utilizan para aparcar. Los hechos tuvieron lugar anoche, pasadas las 22 horas, cuando la mujer acababa su turno de trabajo y se disponía a coger su vehículo para regresar a casa.

Trabajadores del Hospital han celebrado este mediodía una concentración de condena y en protesta por lo ocurrido, donde la Junta de Personal ha exigido al Ayuntamiento de La Vila más vigilancia policial y más seguridad en los caminos y accesos al recinto sanitario.

Según la información recabada por este diario, la sanitaria fue agredida tras finalizar su turno de trabajo y cuando procedía a dejar enseres en su coche para volver a casa. Los presuntos agresores se acercaron a ella con la cabeza y el rostro completamente tapados por dos cascos de motocicleta. Le robaron el bolso, le propinaron varios golpes y, tras tirarla al suelo, trataron de agredirla sexualmente, aunque la víctima se resistió y evitó que consumaran la agresión.

A pesar de que los dos hombres iban con cascos integrales, la mujer ha podido reconocer un tatuaje. La trabajadora logró llamar al 112 y fue atendida por sus compañeros y ha recibido atención psicológica.

La investigación está en manos de la Policía Judicial de la Guardia Civil, mientras el equipo de seguridad del centro sanitario estudia las imágenes de las cámaras para tratar de localizar a los supuestos agresores en el caso de que volvieran a pasar por el hospital.

Concentración

Cerca de un centenar de trabajadores, junto al equipo directivo del Hospital de La Vila, se han concentrado este mediodía a las puertas del Hospital para mostrar su "repulsa" por "ataques, desgraciadamente, cada vez más comunes hacia las mujeres", un hecho que es "terrible".

La gerente del centro, Rosa Louis Cereceda ha explicado que la trabajadora salió de trabajar a las 22.00 horas y fue asaltada en un camino "un poco alejado", ya que la empleada entró a su puesto a las 15.00 horas y no encontró sitio en el aparcamiento interior del Hospital, una instalación que lleva años colapsada y que obliga a ciudadanos y sanitarios a aparcar en la cuneta o en otros caminos cercanos al recinto.

Al haber ocurrido la agresión al término de la jornada laboral, según la gerente, se considera un hecho "in itinere", por lo que la Conselleria de Sanidad "respaldará a la trabajadora en todo, por su puesto".

La responsable ha recordado que hay presupuestada y "a punto de empezar ya" la construcción de un nuevo aparcamiento con "perfecta iluminación y cámaras" y ha añadido que pedirán al Ayuntamiento que ilumine mejor la carretera aunque los hechos sucedieron en un camino y "es más difícil".

Por su parte, la junta de personal ha denunciado una vez más las deficientes instalaciones para aparcar que hay en el Hospital y la falta de seguridad a la que se enfrentan a diario trabajadores y usuarios cuando han de salir fuera del recinto a por sus vehículos por la noche.