Otro retal de la historia de Benidorm que el progreso borrará. Los técnicos del Ayuntamiento de la capital turística han autorizado la demolición de una de las antiguas viviendas que todavía quedan en pie en el casco histórico de la ciudad de los rascacielos. Así, el número 38 del Paseo de la Carretera quedará reducido a escombros para, más adelante, permitir la construcción de un nuevo edificio. Por ahora, el departamento jurídico del Consistorio benidormense ya ha dado luz verde al proyecto de derribo de esta finca con solera, según se expone en un informe que pasará por comisión informativa de Urbanismo el próximo lunes y al que tuvo acceso ayer este diario.
El inmueble que será derruido en unos meses está emplazado en uno de los ejes viarios más importantes de la ciudad turística: el Paseo de la Carretera. Una calle en constante transformación que volverá a ser testigo mudo de otro cambio en la ciudad turística. La finca en cuestión, de dos plantas de altura y que alberga dos locales comerciales en sus bajos, mantiene esa fisonomía del pueblo de pescadores que antaño fue Benidorm.
Un nuevo edificio ocupará su lugar, según adelantaron ayer fuentes municipales, mientras que algunos responsables de tiendas en el Paseo de la Carretera comentan ya que la intención es albergar una galería comercial. No obstante, por ahora, no se ha presentado proyecto alguno ante el Ayuntamiento, como confirmó ayer la concejal de Urbanismo, Lourdes Caselles, a preguntas de este diario. «Solo tenemos el proyecto de derribo, que ya ha sido autorizado y pasará por comisión el próximo lunes», explicó la regidora popular.
Licencia y requisitos
Así las cosas, una vez autorizada definitivamente la demolición, la empresa solicitante de la mismo tiene licencia de obra por un periodo de seis meses. Los trabajos tienen un plazo de un mes, como se detalla en el informe jurídico que firmó la técnico superior de Asuntos Jurídicos esta misma semana y que pasará por comisión el próximo lunes. El permiso podría verse afectado en caso de que la actuación no arranque en el periodo estipulado o si las obras comienzan pero quedan suspendidas durante más de medio año.
Fianza
Además, cabe destacar que la empresa que solicitó tirar abajo este inmueble el pasado mes de octubre debe presentar una fianza de 1.350 euros para cubrir los arreglos en caso de que los trabajos de demolición puedan afectar a los servicios públicos existentes en este tramo del Paseo de la Carretera, más próximo al parque de Elche, o a sus infraestructuras.
