Boquiabiertos. Así se quedaron las miles de personas congregadas anoche en Jaime I para asistir al espectáculo piromusical a cargo de los valencianos de Pirotecnica Ricasa que una vez más no defraudaron. A las 00.00 horas en punto comenzaron a sonar los primeros acordes de la música del pasadoble «Fiesta en Benidorm» que acompañados de fuego aéreo abrieron la mascletà nocturna de una intensa carga explosiva con nada menos que 190 kilos de pólvora.

En concreto, la mascletà nocturna se dividió en tres partes claramente diferenciadas. El arranque piromusical centró el inicio del disparo donde la música fue la absoluta protagonista haciendo las delicias de los espectadores, especialmente de los cientos de festeros allí presentes ya que «Fiesta en Benidorm» es, desde estas celebraciones, el himno oficial de los festejos. Ricasa introdujo parte de esta pieza musical para rendir homenaja a Rafael Domenech, el compositor del pasodoble que, además, cumple este años cuatro décadas.

Final multicolor

La fase terrestre de la mascletà tuvo cinco partes rítmicas donde el fuego aéreo terminó de completar el estruendo. El apoteósico final, programado de manera digital, contó con alrededor de 300 carcasas aéreas multicolores que pusieron el broche final al espectáculo.

La última mascletà festera tendrá lugar hoy a las 14.00 horas en la avenida Jaime I en recuerdo de todos los peñistas fallecidos. El disparo correra a cargo de la pirotecnia Lluch.