No hay fiesta que se precie sin música. Y eso es algo que los peñistas de Benidorm lo saben de sobra. De ahí que cada noche las charangas inunden cualquier rincón de El Calvari. De hecho, cada vez son más las penyas que como l'Ancora repiten cada año con la misma banda para que a las largas noches de los días grandes juerga no les falte el ritmo.