Son días de fiesta pero también hay tiempo para la solidaridad. Así lo están demostrando los peñistas de Benidorm que llevan rascándose el bolsillo desde el pasado viernes para colaborar con los niños que batallan contra el cáncer a raíz de la iniciativa puesta en marcha este año por la penya El Llondro para celebrar su decimoquinto aniversario. Una hucha preside el local de esta agrupación festera, ubicada en la mítica calle La Palma, durante todas las celebraciones con el objetivo de recaudar la máxima cantidad posible para la Asociación de Padres de Niños con Cáncer de la Comunidad Valenciana (Aspanión).

Se trata de una iniciativa que ha puesto en marcha El Llondro tras vivir en primera persona una experiencia de esta índole. Alba, una integrante de la penya que ahora tiene 17 años, celebra durante estas Fiestas Mayores Patronales que al fin ha superado la leucemía que le fue diagnosticada una década atrás, cuando tenía 7 años.

Animar a los enfermos

La historia de Alba tiene un final feliz ya que, finalmente, ha logrado superar el cáncer que le fue detectado cuendo era una niña. Es por ello, que los festeros de su penya han querido tener un gesto hacia todos aquellos pequeños que viven una experiencia similar para, entre otras cosas, demostrarles que es posible superar la enfermadad y seguir adelante siempre con una sonrisa.

Bajo el lema «porque en fiestas regalar sonrisas cuesta muy poco» los peñistas de El Llondro vienen animando, durante todas las celebraciones, al resto de festeros a dejar un donativa cada vez que pasan a visitarles. «Cada vez hay más billetes. Están colaborando muchos peñistas que vienen en grupos a hacernos un donativo», explicó Lola, una de las componentes de la mitica penya que este año cumple 15 años.

Decoración

Pero la cosa no queda ahí. La penya El Llondro suele participar cada año en el concurso de engalamiento festero que organiza l'Associació de Penyes. Y, durante estas celebraciones, como no podía ser de otra manera, también lo han hecho pero de una manera especial.

«En lugar de pagar 200 0 300 euros más para decorar la fachada de nuestra sede hemos decidido echar ese dinero en la hucha y adornar la pared con los dibujos que nos han dado los niños de Aspanión», explican desde la agrupación festera. Así las cosas, la pared de la penya está llena de bonitas estampas que dejan ver la otra cara de las Fiestas Mayores Patronales donde reina la solidaridad y la hermandad entre festeros y donde también hay cabida para las buenas causas.