La nueva planta potabilizadora de La Nucía ya está en marcha y esta semana han finalizado las pruebas de puesta en marcha. La infraestructura está eliminando ya el 90% de la turbidez del agua proveniente del pantano, lo que permite «suministrar agua a todos los vecinos de La Nucía con unos estándares de calidad por encima de los exigidos por las autoridades sanitarias y que marca la ley». La planta ha supuesto una inversión de 1,5 millones de euros y ha sido asumida al 100% por Aqualia, empresa concesionaria del servicio municipal de aguas.

Esta planta Potabilizadora, tras varios meses de tests, ha concluido las pruebas de su puesta en marcha y está evitando ya, entre otros, los problemas derivados por la turbidez del agua que se producen después de fuertes lluvias en la comarca de la Marina Baixa. Está ubicada en el sótano del Almacén Municipal y ocupa una superficie de 352 metros cuadrados.

Su puesta en marcha «supone un salto cualitativo en la calidad del agua potable que llega a las casas de La Nucía», según el alcalde Bernabé Cano.

Medición de parámetros

La planta funciona de forma totalmente automatizada, ya que cuenta con una serie de medidores de caudal, presión y turbidez, que leen los parámetros del agua a la entrada y salida de la ETAP. Estos datos se envían directamente al puesto central, que toma las decisiones de forma automática sobre los diferentes elementos de la misma. Dicho sistema avisa a los operarios en caso de cualquier anomalía o variación en los estándares, que a través del sistema de telegestión, pueden controlarla a distancia.

Además, la planta potabilizadora se ha diseñado para un consumo mayor del actual, se ha dimensionado para una población de 40.000 habitantes, el doble de padrón de La Nucía actual. Los equipos se han dimensionado para poder abastecer a una población superior, para que tenga una larga vida útil. Además el sistema de tratamiento colocado es modulable, por lo que se podría ampliar, según las mismas fuentes.