Las fuertes lluvias registradas ayer al mediodía en Benidorm dejaron atrapadas a ocho personas en el interior de seis vehículos debido a la acumulación de agua en la carretera por la que circulaban en ese momento. Estas personas, todas ellas adultas, tuvieron que ser rescatadas por efectivos del parque comarcal de Bomberos.

Los hechos tuvieron lugar poco después de las tres de la tarde a la altura del conocido como cruce de Orozco, donde confluyen la avenida de Bernat de Sarrià con la carretera del Albir, en el Rincón de Loix. Fuentes del Consorcio Provincial de Bomberos confirmaron que ninguna de las personas rescatadas resultó herida, aunque indicaron que el agua llegó a una altura superior a los 70 centímetros, lo que les impedía salir de estos vehículos por su propio pie, de ahí que fuera necesaria su intervención.

Las precipitaciones, además, anegaron varias calles e hicieron que rebosara un colector en el paseo de Levante, a la altura de la avenida de Ametlla del Mar, causando daños en el pavimento del propio paseo. Fuentes municipales han confirmado que los daños quedaron reparados a lo largo de la misma tarde de ayer y la vía fue reabierta al tráfico pasadas las 20.30 horas.

El Rincón fue la zona más afectada por la tromba de agua, que en apenas 10 minutos dejó más de 40 litros por metro cuadrado y con picos de hasta 60 litros en momentos puntuales.

Mientras, en el barrio de La Cala, el lado opuesto de la ciudad, apenas se alcanzaron los 10 litros por metro cuadrado. A pesar de que la acumulación de agua fue menor en esta zona, el agua arrastró lodos de las obras del nuevo PAI y taponó de barro el tramo final del barranco de Rajarell, a la altura de la playa, tal y como confirmaron vecinos de la zona.

Otras de las zonas donde más problemas se generaron fue la calle Zamora y la conocida como "curva del Number One", en la avenida de Alfonso Puchades. En esta transitada vía, la Policía tuvo que cortar la circulación durante algunos minutos al ser imposible transitar debido al inmenso charco que se produjo. No obstante, a diferencia de ocasiones anteriores, esta vez no quedó ningún vehículo atrapado en su interior.