Los hoteles de Benidorm iniciaron septiembre registrando, un mes más, un dato en negativo. En concreto, durante los primeros quince días de este mes, los establecimientos turísticos de la ciudad han registrado una ocupación del 91,8 por ciento, lo que supone un descenso de 1,5 puntos con respecto al mismo periodo de 2017, según se desprende de los datos facilitados ayer por la patronal hotelera Hosbec.

Estas cifras indican que se ha llegado a resultados de ocupación similares a los de los años de la crisis económica. De hecho, según Hosbec, Benidorm no alcanzaba una ocupación tan baja en este período desde los años 2010 (87,7%) y 2012 (91,7%): «La desaceleración sigue las mismas pautas que el resto de meses de verano, salvo agosto», apuntaban desde la patronal.

A la hora de determinar las causas, el análisis de los hoteleros se centra en la pérdida de fuerza del mercado británico, que en lo que va de año se ha dejado 388.000 pernoctaciones por el camino. Esta caída, a su vez, es atribuible a varias causas.

Por un lado, el «desvío» de viajeros hacia otros puntos turísticos como Turquía, Egipto y Túnez, «competidores directos del modelo de sol y playa español». Por otro lado, el descenso también guarda «una relación directa con la bajada en la capacidad aérea». No en vano, de un año a otro el aeropuerto de Alicante-Elche ha perdido 26.210 plazas de los principales puntos emisores del Reino Unido.

Una tercera explicación para el descenso de la ocupación en hoteles se sitúa en «el cambio de tendencia en el alojamiento y el aumento de reservas en los pisos turísticos», una modalidad de alojamiento que, según Hosbec, el mercado británico cada vez demanda más: «Entre los diez huéspedes más habituales de estos alojamientos encontramos que ocho proceden de las islas británicas», mantienen desde la asociación empresarial. Y el turismo nacional crece

En la cara positiva de la moneda destaca la recuperación del mercado español, que en este periodo ocupó el 42,4% del total de las plazas y experimentó un crecimiento de dos puntos sobre el año pasado. La buena evolución de los nacionales permitió a los hoteles de la ciudad amortiguar en buena medida la caída del turismo inglés. O, como apunta Hosbec, «están consiguiendo cubrir el descenso de los británicos en lo que llevamos de año».

Respecto a la distribución de los clientes por tipología del hotel, desde la organización turística han apuntado que todas las categorías descienden en porcentaje de ocupación, excepto los establecimientos de dos estrellas. La principal bajada la sufren los hoteles de 4* superior (-9,4 puntos), así como el 3* (-1,8 puntos). Es un descenso que ha sido generalizado para todo el destino, pero su impacto ha sido superior en el segmento más alto de la oferta.

Pese a todo, el presidente de la patronal, Toni Mayor, considera que el sector "no debe adoptar una actitud pesimista" y sí continuar apostando por diversificar los mercados de cara a 2019.

La previsión de ocupación para la segunda parte del mes es de un 90,2%.