El Ayuntamiento de Benidorm ha obtenido cerca de 2,5 millones para poner en marcha su proyecto de destino inteligente, que está valorado en cuatro millones de euros. Así lo ha anunciado esta misma mañana el alcalde de la ciudad turística, Toni Pérez, tras recibir la resolución definitiva de la convocatoria hecha pública hoy.

Se trata de una iniciativa con la que la ciudad turística quiere convertirse en el primer destino inteligente certificado del mundo y para el que Benidorm quiere sumergirse en una transformación digital de la que más adelante disfrutarán "tanto turistas como vecinos", como ha especificado esta mañana el alcalde de la capital de la Costa Blanca.

Como ha matizado Pérez, el proyecto tiene carácter bianual y con la ayuda de 2,5 millones que ahora se ha logrado se cubrirá el 60% del mismo mientras que el restante será desembolsado desde el Ayuntamiento a través de dos inversiones municipales, una de ellas prevista ya en el presupuesto de el presente ejercicio de 804.611,75 euros y otra de idéntica cantidad que se debe incluirse en las cuentas del próximo año.

El alcalde ha manifestado que en la transformación digital en la que incide este proyecto “el Ayuntamiento trabaja de la mano de empresas que nos prestan sus pilotos o servicios -como es el caso de Inteligencia Turística-, con la implicación máxima de Visit Benidorm y de los técnicos municipales, y junto con el Ente Gestor del DTI”.

Por otra parte, ha significado que en el último año Benidorm ha logrado subvenciones de fondos europeos por importes superiores a los 16 millones de euros. Así, además de los recursos del programa Red.es, se han obtenido 10 millones de euros para implementar la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrador (EDUSI); cerca de 2 millones para los planes de empleo EMCUJU y EMPUJU con las que se ha procedido a la contratación de más de un centenar de jóvenes menores de 30 años; y alrededor de 2,1 millones para la creación del anillo ciclista de Levante y la consolidación y puesta en valor de El Castell y El Tossal de la Cala.

En este sentido, ha señalado que la obtención de todos estos fondos es el resultado de la línea emprendida en el año 2015 y que se basa en “trabajar para presentar proyectos sólidos” con los que optar a las convocatorias de ayudas que lancen las diferentes administraciones; una tarea en la que “anteriormente Benidorm estaba en el furgón de cola”.

El proyecto ‘Benidorm, Destino Turístico Inteligente y Sostenible’ ha logrado una puntuación de 7,72 puntos, siendo la quinta mejor valoración de las 24 administraciones beneficiarias de esta convocatoria de Red.es.

Detalles del proyecto

El proyecto ‘Benidorm, Destino Turístico Inteligente y Sostenible’ pivota sobre cuatro ejes: Gestión inteligente, Playas inteligentes, Sostenibilidad y eficiencia energética, y Satisfacción turística y ciudadana. La inversión prevista para el eje de Gestión Inteligente asciende a 1.538.844,61 euros; mientras que las Playas Inteligentes se reservan 984.584,60 euros. Las acciones de Sostenibilidad y eficiencia energética tienen un presupuesto de 938.555,21 euros, y 333.354,01 euros se prevén para Satisfacción turística y ciudadana. Por último, hay una dotación de 227.720,31 euros para gastos de auditoría, seguimiento, comunicación y evaluación, exigidos por la convocatoria.

La implantación del proyecto permitirá obtener resultados específicos a nivel turístico como son: mayor competitividad y mejora del posicionamiento turístico; mejora de la experiencia del turista antes, durante y después del viaje; incremento de la calidad de vida de los turistas y también de los residentes; mejora de la accesibilidad universal; y mejora de la conectividad entre turistas, residentes, empresas y servicios. Pero además, en el ámbito medioambiental posibilita una gestión de la calidad del agua de las playas con un menor impacto ambiental, beneficios en la movilidad y la seguridad, y prevención a través de alertas; mientras que a nivel económico y cultural se generan nuevos nichos de empleo, se impulsa la creación de nuevos modelos de negocio y se da una puesta en valor del comercio, de la industria local y del patrimonio cultural y arquitectónico para su preservación.