La Generalitat Valenciana ha dado luz verde para el inicio de las obras de ampliación del sistema de riego localizado por goteo que afectará a las partidas de Quintanes, Mandem, Benimussa, La Pila y Cap Negret. Estas zonas, aledañas a la ribera del río, se vieron excluidas en 2004 del proyecto inicial de modernización del riego de Altea al estar incluidas dentro del la macro urbanización Los Puentes del Algar, proyecto urbanístico que pocos años después fue anulado por sentencia del Tribunal Supremo. Los trabajos, una vez supervisado el proyecto sobre el terreno por la técnico de la Consellería de Agricultura, Ganadería y Pesca, Beatriz Soriano, y por el director técnico del proyecto, Juan Marcos Cano, se iniciarán en los próximos días y se prolongarán hasta el primer trimestre de 2019.

El proyecto, del que se beneficiarán más de un centenar de pequeños agricultores, cuenta con un presupuesto de algo más de 200.000 euros que serán financiados a partes iguales por la Consellería de Agricultura y la Comunidad de Regantes y Usuarios de Altea (CGRUA), colectivo que a principios de este año convocó un concurso para adjudicar esta infraestructura, otorgada finalmente en abril a la empresa Elecnor. Beatriz Soriano se reunió el pasado viernes en Altea con el director técnico de la obra, Juan Marcos Cano y con directivos de la CGRUA, encabezados por su presidente, Joaquín Ferrer, para replantear el proyecto y ultimar los detalles de cara al inminente inicio de las obras.

La técnico visitó los terrenos afectados por el proyecto, así como las infraestructuras que abastecerán a estos nuevos ramales de riego. Joaquín Ferrer señaló ayer que los trabajos «se realizarán de un modo escalonado para poder acabarlos durante el primer trimestre de 2019, fecha en la que entrará en pleno servicio el nuevo sistema de riego en estos terrenos colindantes con el cauce del río Algar que fueron recalificado al incluirse en la macrourbanización Los Puentes del Algar, por lo que fueron excluidos del proyecto inicial de modernización de los riegos tradicionales de Altea, y que históricamente tenían derecho a las aguas de riego». Ferrer afirmó que estos terrenos forman parte de las comunidades de regantes de Pere Jaume, La Pila y Cap Negret, Reg de Baix y Reg Nou, y añadió que el proyecto de riego por goteo se ha reactivado «debido a la demanda de los propietarios de estos terrenos, los cuales fueron excluidos inicialmente del plan general para la implantación del riego localizado en el municipio iniciado en 2004».

Ahorro de 14.000 m3 diarios

El nuevo sistema de riego por goteo para el campo alteano comenzó a instalarse en 2004, y del mismo se están beneficiando más de 1.500 agricultores propietarios de 346 hectáreas de regadío. La inversión de esta infraestructura fue de casi cuatro millones de euros, de los que la Conselleria de Agricultura, Pesca y Alimentación aportó 2.980.000 euros, y el resto corrió a cargo de los agricultores alteanos. Con estas obras, que acabaron en 2006, se consiguió ahorrar cerca de 14.000 metros cúbicos diarios de agua, ya que se cambió el clásico riego a manta o de inundación por el de goteo mediante un sistema controlado tecnológicamente para aportar el líquido necesario a cada producción agrícola.

Las obras se realizaron en dos fases. Una primera donde, con una inversión de 2,3 millones de euros financiados íntegramente por la Consellería de Agricultura, Pesca y Alimentación, se construyó un embalse con capacidad para almacenar 37.000 metros cúbicos de agua y una red de 7,3 kilómetros de tuberías para la conducción general de agua que se transportará hasta las propias redes de riego desde dicha balsa situada cerca del Pozo de Picó, donde se concentran las aguas de riego de las comunidades de regantes del Rec Nou, Rec Major y Rec de Pere Jaume, además de la instalación de 1.600 metros de tuberías de bombeo hasta el embalse regulador, más otros 57.000 metros de conducción general hasta las redes de riego. Y una segunda fase para las propias redes de goteo en las 346 hectáreas de campo, pertenecientes a 1.500 agricultores miembros de las tres comunidades de regantes beneficiadas con un presupuesto de 700.000 euros.