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Lucha contra los vehículos en el casco antiguo de La Vila Joiosa

La nueva ordenanza para regular las zonas de acceso restringido al centro histórico acabará con las motos y coches aparcados en vía pública

Lucha contra los vehículos en el casco antiguo de La Vila Joiosa

Sin vehículos aparcados en la vía pública en el casco antiguo de La Vila Joiosa. El Ayuntamiento ha aprobado la nueva ordenanza reguladora de las zonas de acceso restringido al centro histórico, la que permitirá poner en marcha el control de entrada y salida de coches y motos del barrio, pero además, se acabará con los turismos aparcados en cualquier rincón de las céntricas calles.

Y es que con el nuevo control de accesos, que se pondrá en marcha en cuanto la ordenanza se apruebe de forma definitiva, los conductores sólo podrán acceder al casco antiguo durante 30 minutos, según recoge la nueva normativa.

El concejal de Servicios Técnicos, Pascal Amigo, explicó a este diario que «sólo se podrá entrar para salir a la media hora» a excepción de los que «tengan un garaje con vado» en activo, que son «muy pocos». Por tanto, ya no se podrá estacionar turismos en plazas o rincones en las calles del casco histórico pero tampoco motocicletas o ciclomotores en la vía pública. Además la plaza Castelar y la de la Iglesia quedarán totalmente libres de vehículos a motor aparcados, a excepción de la zona de carga y descarga. A cambio, los vecinos podrán acceder hasta sus viviendas para descargar los coches, por ejemplo, pero sólo por un periodo máximo de media hora.

La intención del Ayuntamiento con la puesta en marcha de este nuevo sistema de control de accesos es acabar con el «mal uso» del tráfico rodado en las calles más céntricas. Es más. La ordenanza recoge que esta «materialización» del control de accesos es el «eje principal» de las medidas de protección del centro histórico en cuanto a la forma de desplazarse en ese entorno. Además, este sistema pretende garantizar «eficazmente la movilidad sostenible en la zona protegida de mayor interés cultural y artístico» del municipio. De hecho, el casco antiguo está declarado como Bien de Interés Cultural (BIC) por lo que tiene una especial atención.

Así, cuando comience a funcionar el sistema, la circulación de vehículos rodados será mínima y sólo «la que dé servicio a los vecinos», según indicó el edil. Por tanto, a parte de esos 30 minutos para los residentes, tendrán acceso los vehículos oficiales, de empresas suministradoras, transporte, taxi, fuerzas y cuerpos de seguridad del estado o asistencia sanitaria, entre otros.

¿Cómo funciona?

Las entradas y salidas del casco antiguo en vehículos rodados se hará sólo por los puntos de control de accesos. Uno de ellos estará situado en la subida a la plaza Castelar y será tanto para entrar como para salir. Así en la confluencia de la calle Arsenal con San Telmo habrá uno sólo para salir de las calles más céntricas mientras que en la confluencia de la avenida Doctor Esquerdo y el paseo de San Pedro habrá uno sólo para entrar, según el documento.

El punto de control de acceso funcionará mediante cámaras que leerán las matrículas. Cada vehículo se incluirá en una base de datos en la Policía Local para su control. Así, cada vecino podrá incluir un máximo de dos coches pero «sólo se podrá acceder» con uno a la vez al casco histórico con la excepción de si se tiene que dirigir a un garaje para cambiar de coche, según recoge la ordenanza. Como ya ocurre en otros barrios céntricos de grandes ciudades, los turistas que acudan a hoteles o alojamientos turísticos reglados también podrán obtener una autorización mientras dure su estancia. En el mismo caso estarán los transportes por mudanzas u obras.

Con todo, aquellos que no cumplan con lo establecido en la nueva ordenanza de acceso restringido al casco antiguo se enfrentan a sanciones entre los 100 euros (en caso de ser leves) o los 500 euros (muy graves).

La ordenanza ya está aprobada provisionalmente y, una vez que se publique en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) habrá 30 días para presentar reclamaciones o sugerencias. Una vez que se resuelvan éstas o si no hay ninguna, se aprobará definitivamente por lo que ya se podrá poner en marcha el nuevo control de accesos, cuyo sistema lleva instalado desde finales de 2016. Con todo, Amigo indicó que la puesta en marcha de este sistema se ha trabajado de forma consensuada con el resto de grupos políticos y la asociación de vecinos.

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