La falta de acuerdo entre técnicos de distintos departamentos del Ayuntamiento de Benidorm obligó ayer al gobierno local a frenar la adjudicación de uno de los proyectos estrella de esta legislatura: la primera fase de las obras de remodelación de la avenida del Mediterráneo, una de las actuaciones más prometidas en la ciudad en la última década y que ayer recibió un inesperado revés.
El ejecutivo local, una coalición formada por PP y CBM, había convocado para primera hora una mesa de contratación donde debían analizarse los informes elaborados por el área de Ingeniería sobre las propuestas técnicas y proceder a la apertura del último sobre, antes de proceder a la propuesta de adjudicación, que después debería ratificar el pleno. Sin embargo, según explicaron fuentes municipales, una divergencia entre los distintos técnicos que componen esta mesa acerca de dichos informes obligó a paralizar la celebración de la misma, al considerar que faltaban por valorar algunas cuestiones que, sin embargo, no eran relevantes para el resto de funcionarios. Ante esta discrepancia, la mesa de contratación quedó finalmente suspendida. Y ahora el gobierno local ha vuelto a convocar de nuevo a este organismo para el próximo viernes, con la esperanza de que dicha reunión sirva para, de una vez por todas, desbloquear la adjudicación de este proyecto.
Un jugoso contrato
Once empresas de prestigio nacional se presentaron a la licitación de estas obras de remodelación de la avenida del Mediterráneo, una de las principales arterias residenciales y comerciales de Benidorm. Las obras están valoradas en más de 11,4 millones de euros y prevén, en su primera fase, la renovación integral de la superficie y el subsuelo de la avenida del Mediterráneo; en concreto, desde la calle Puente hasta la avenida de Europa. Además, el proyecto incluye también la remodelación de otras vías aledañas, como el tramo pendiente de la calle Doctor Pérez Llorca, así como la calle Valencia, la avenida de Bilbao y la calle Periodista y Escritor Emilio Romero.
El elevado número de empresas que han optado a este proyecto responde a dos factores: por un lado, el elevado coste de la obra, que supera los diez millones de euros; por otro, el prestigio que para las mismas podría acarrear el hecho de ser el artífice de la remodelación de una de las avenidas más populares y transitadas de Benidorm, tanto por vecinos como por turistas.
Premura por adjudicar
Como ya reconoció hace semanas el alcalde Toni Pérez, el gobierno de Benidorm quiere adjudicar cuanto antes la obra de Mediterráneo. En primer lugar, porque el plazo de ejecución es de 11 meses y el PP quiere comenzar los trabajos antes de octubre para que sólo afecten a un verano y una Semana Santa. En segundo lugar, como tampoco se puede olvidar, por la cita electoral del próximo año, a la que los populares quieren llegar con la obra avanzada.
