Los propietarios de suelo en el Programa de Actuación Urbanística (PAU) Murtal de Benidorm han encontrado una solución para acabar con el bloqueo del sector, que ha vuelto a enquistarse debido a las trabas judiciales puestas por la constructora encargada de desarrollar los terrenos, Prometosa Construcciones SL. Así las cosas, una quincena de titulares de parcelas en este área de la ciudad turística, que aglutina 907.753 metros cuadrados, han adelantado el pago de sus cuotas de urbanización para costear las indemnizaciones que la mercantil adjudicataria del PAU se resiste a pagar. Una vez abonadas las compensaciones a los acreedores netos -aquellos que perdieron sus terrenos en el proceso de reparcelación- el Ayuntamiento podrá concluir el citado procedimiento y arrancar, de una vez por todas, las obras de desarrollo, como recalcó ayer a este diario la edil de Urbanismo, Lourdes Caselles.
Cabe recordar que la constructora Prometosa ha presentando un recurso contencioso administrativo contra el Ayuntamiento de Benidorm para evitar el pago de estas indemnizaciones. La mercantil alegó un «grave perjuicio» a su patrimonio por tener que abonar estas indemnizaciones, cuyo coste es de 62.500 euros, lo que representa un 0.3% de la repercusión económica del programa. A efectos prácticos, este nuevo frente vuelve a dilatar el desarrollo del plan, que fue adjudicado en el año 2000.
De ahí que los propietarios, cansados de esperar, dieran un paso al frente y trasladaron un escrito al Ayuntamiento donde exponían que «la forma más rápida de desbloquear la situación sería que adjudicatarios de parcelas a los que corresponde pagar la cuota efectúen la consignación a favor de los propietarios a los que corresponda percibir las indemnizaciones», según ha podido leer este diario.
Un ofrecimiento que el Ayuntamiento ha aceptado tras contar con todos los informes técnicos y económicos a su favor, como confirmó ayer Caselles, que informó hace unas semanas al resto de grupos políticos de la Corporación de esta medida durante las comisiones informativas. La edil, además, indicó que una vez recaudado todos los pagos de los propietarios se podrá proceder a escriturar en el Registro de la Propiedad el documento de reparcelación lo que permite culminar con el procedimiento y iniciar así los plazos ya dispuestos para desarrollar un plan donde están proyectadas nada menos que cerca de unas 3.000 viviendas.
Hay que tener en cuenta que este programa urbanístico estuvo enquistado durante tres lustros por las batallas judiciales entre Ayuntamiento y propietarios del terreno. Sin embargo, hace ahora dos años y medio, Benidorm dio carpetazo al último proceso judicial que impedía el desarrollo del sector y se puso manos a la obra para sacar adelante, de una vez, el desarrollo de este plan, que ya contempló el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), aprobado en 1990, que rige todavía el urbanismo de la ciudad de los rascacielos.
