Salir a tomar algo, comer bajo el sol o disfrutar de un helado para afrontar el calor. Los vecinos y turistas de Benidorm aprovechan los meses de verano para estar en la calle y poder sentarse en las decenas de terrazas que llenan las principales vías del centro urbano del municipio. Pasear por algunas calles es hacerlo al lado de veladores llenos, sobre todo, cuando cae el sol y la ligera brisa da un respiro al calor veraniego. Pero no sólo las terrazas son cosa de julio y agosto en Benidorm. El buen clima de la ciudad hace que el resto del año también se pueda estar en cualquier zona con mesas y sillas antes de caer la tarde.
En la capital turística, 373 establecimientos tienen autorización para montar terrazas, según fuentes municipales, un número que se ha estabilizado en los últimos años. En ellos, hasta 1.834 mesas pueden ser colocadas para que los transeúntes puedan sentarse en bares, restaurantes o cafeterías.
La capital de la Costa Blanca, según datos de 2018 recogidos en Benidorm en cifras, cuenta con 1.177 de estos establecimientos en toda la ciudad; así que el 32% de ellos ofrecen a sus clientes espacios al aire libre y en la vía pública para poder comer, cenar o disfrutar de cualquier bebida o helado. Una cifra de bares, cafeterías o restaurantes que ha subido ligeramente desde 2016 cuando había 1.146 abiertos, según las mismas fuentes.
Pero contar con tantas terrazas autorizadas en una ciudad como Benidorm lleva aparejado también garantizar el equilibrio entre vecinos, transeúntes y aquellos que quieren sentarse al aire libre. Para ello, la normativa establece cuántas mesas y sillas puede tener cada negocio según los metros de fachada y los locales de alrededor que también quieran sacar mesas a la vía pública. Además se suma que hay unos horarios establecidos para la actividad de los locales. Así, desde el Ayuntamiento se vigila «permanentemente» que se cumplan con las autorizaciones, esté todo en orden y ocupen sólo el espacio que se les tiene asignado, algo que se controla todo el año pero con la llegada del verano se intensifica llevando a cabo reuniones con los comerciantes y restauradores para afrontar la temporada estival.
Benidorm cuenta con varias zonas en las que las mesas y sillas llenan la vía pública. Es el caso de calles como Alameda o Martínez Alejos en pleno centro o la calle Gerona, las tres vías peatonales. En estos espacios cada local tiene su hueco. Así en calles como Alameda, las terrazas entraron en auge hace unos años. Por ello, el Ayuntamiento tuvo que intensificar el control sobre las terrazas en esta céntrica calle para llegar a un equilibrio entre el descanso y los que querían sentarse en las calles. La iniciativa y las campañas informativas llevaron a regular la situación y establecer un orden dónde situar mesas y sillas. Desde entonces, esta céntrica calle es una de las más llenas en verano.
