La remodelación de la avenida del Mediterráneo de Benidorm se ha convertido en una de las obras más emblemáticas de la ciudad en décadas. Por una parte por ser una de las arterias principales de la capital turística; por otra, por la inversión con la que contarán los trabajos y que llega a los 11,5 millones de euros. Así que el gobierno local lo tiene claro: es un proyecto llamativo que puede hacer que lleguen un «aluvión» de propuestas para llevarlo a cabo.

A ello contribuirá además que la licitación se hará en el Diario Oficial de la Unión Europea por un periodo de 45 días después de que ayer se completara otro trámite: la aprobación de los pliegos de condiciones.

«Es un proyecto en el que los técnicos han sido muy exigentes con las mejoras del contrato», explicó a este diario el portavoz del PP José Ramón González de Zárate. Pero no por ello habrá menos interés en acometer esas obras por parte de las empresas. «En toda la Comunidad Valenciana o España no se ha licitado por ahora ninguna obra que casi llegue a los 12 millones» y con una mejora del subsuelo tan importante que hará que sean empresas o UTEs especializadas las que puedan presentar sus ofertas, pero no sólo de España, sino también de Europa.

Por mayoría

Los pliegos de condiciones se aprobaron ayer por mayoría de 24 votos a favor frente a una abstención en un nuevo pleno extraordinario, el segundo de este mes, y después de que en la última sesión de hace una semana se tuviera que retirar el punto ante las dudas surgidas en la oposición, precisamente, por cómo se iba a financiar el proyecto.

El pasado viernes, los técnicos municipales resolvían algunas de esas cuestiones en una Junta de Portavoces. El proyecto tiene carácter bianual y un coste de ejecución de 11,4 millones de euros (con IVA), de los cuales el Ayuntamiento deberá aportar 2,8 millones en dos años (el 25%). El resto, se financiará con cargo al Fondo de Renovación del contrato del agua, cifrado en 4,5 millones de euros anuales.

En esa reunión se especificó qué porcentaje exacto de cada parte de la obra correrá a cargo de Hidraqua y, en cuanto a la aportación municipal, el presupuesto de este año recoge un millón de euros para esta obra y otro para 2019. A esa consignación se sumarán 800.000 euros, que se atenderán de la bolsa de vinculación de Vías Públicas, de la que ya se ha retenido dicho importe.

El portavoz del PSOE, Rubén Martínez, fue uno de los que solicitó la pasada semana esta última cuestión para evitar una posible impugnación posterior. Ciudadanos (Cs), por su parte, aclaró en el pleno que no es la empresa quien paga la obra sino que «serán todos los ciudadanos con el pago de cada recibo de agua y alcantarillado». Así, Gema Amor, portavoz de los Liberales, criticó la gestión que ha hecho el gobierno, a quien acusó de «opacidad» y de «tener en cuenta únicamente su interés electoral». El portavoz de Compromís, Josep Bigorra, resaltó que si se hubieran respondido antes las dudas de la oposición, se habría «evitado este nuevo pleno».

De completarse todos los trámites en tiempo y forma, las obras podrían comenzar en el último trimestre del año, en concreto, en el mes de octubre si se adjudica a finales de septiembre.