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Benidorm

«Un destino seguro necesita una comisaría digna y accesible»

Garrido lleva en activo más de 35 años, participando en áreas Antiterroristas y en temas como la lucha contra el tráfico de seres humanos, la inmigración o la trata de blancas

«Un destino seguro necesita una comisaría digna y accesible»

¿Cuáles son sus orígenes y qué le ha llevado a Benidorm

Soy manchego. En la Comunidad Valenciana llevo muchos años, desde el 89. Anteriormente estuve en Barcelona, trabajando en el barrio chino y en brigadas. En Valencia pasé por áreas como extranjería y fronteras. Vine a Benidorm porque a mi carrera le faltaba mandar en una comisaría.

¿La seguridad de Benidorm goza de buena salud?

Benidorm es una ciudad muy segura y la prueba es la gran cantidad de turistas que recibe. El turismo necesita un entorno atractivo, una oferta adecuada y luego, seguridad. Sin ella, los visitantes se irían. Hay colectivos, como los jubilados, que se sienten muy seguros en Benidorm. Esto no quita para haya algunos delitos.

¿Los turistas extranjeros también se sienten seguros aquí?

El SATE se ha trasladado del Torrejó a plena zona inglesa, en el corazón del turismo extranjero. Es de los más importantes de España. Todos los días se presta una ayuda al turista, no solo en materia de denuncias, también una amplia asistencia al visitante en temas como documentación, trámites con el consulado? Es algo que agradecen muchísimo. Por cada hecho delictivo que denuncian, se prestan 6 o 7 asistencias.

¿Cuáles son las principales preocupaciones de la ciudad?

Hay que diferenciar dos zonas, la británica y en la que predomina el turista nacional. En el caso de los españoles, sobre todo entre la tercera edad, preocupa que, por su vulnerabilidad, pueden ser víctimas de hurtos. Los británicos suelen ser más problemáticos como colectivo, aunque en determinadas situaciones, como despedidas de soltero, también puede haber problemas con los españoles. Suelen ser casos derivados de un excesivo consumo de alcohol. A las personas ebrias suelen acudir ladrones o prostitución. También, en zonas de fiesta, hay pequeños focos de menudeo de drogas o pequeñas peleas.

Hay otras cuestiones como los «mojiteros» o los trileros. ¿Hacen falta cambios legales?

Es una problemática que nos reclama la ciudadanía. Estamos intentando abordar este asunto y espero que podamos resolverlo. El trile era antes un delito de estafa y era fácil acometerlo. Ahora multamos una y otra vez, pero es muy difícil cobrar estas sanciones. Estamos trabajando con la concejalía de Seguridad y la Policía Local para que esta situación se lleve a la vía penal, por ejemplo como una reiteración de situaciones de desobediencia ante múltiples infracciones de carácter administrativo. Puede ser una vía. En Benidorm apenas hay venta ambulante, en comparación con otras ciudades de costa. En cuanto a los «mojiteros», se quiere solucionar con una vía parecida a la de los trileros, ya que es muy difícil demostrar que es un delito contra la salud pública.

¿Existen problemas de prostitución en la ciudad?

Pretender que no haya prostitución en una ciudad turística es muy difícil. En sí la prostitución no es ningún delito, pero es algo que nos preocupa, sobre todo si tiene que ver con menores o mafias. En Benidorm la prostitución no está exenta de este tipo de situaciones, pero no es algo extendido. La Ley de Seguridad Ciudadana permite requerir a esta gente para que abandone el lugar en el que están ejerciendo la prostitución e identificar y sancionar a la persona que lo contrata en vías públicas, lo cual no resuelve totalmente el problema.

¿Puede afectar el terrorismo a Benidorm?

No hay que crear alarma. No tenemos ningún indicio que nos diga que vamos a sufrir un atentado, pero tampoco tenemos la seguridad de que España esté libre de peligro. Estaremos atentos. Hay que cumplir las medidas preventivas que dicta la Secretaría de Estado de Seguridad.

Otro problema en la ciudad son las falsificaciones

Hace unos días me reuní con AICO. Es un problema que nos preocupa y que hay que atajar. Las falsificaciones afectan a los comerciantes, creando competencia desleal. Se han intensificado las incautaciones. Hay un grupo específico dedicado a ello, pero tenemos un problema de espacio para almacenar los productos incautados. Necesitamos nuevas instalaciones.

Una de ellas será la nueva comisaría. ¿Llegará pronto?

El cambio de gobierno no debe suponer ninguna traba para que llegue. Los presupuestos deben de salir. Es una necesidad para nosotros y para los usuarios. Benidorm es un escaparate y la Policía necesita un edificio digno y accesible; un inmueble con nuevos servicios como la expedición del DNI o mejores calabozos.

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