Prácticamente cada paso que da un ayuntamiento conlleva emisiones de CO2 derivadas de la actividad municipal. Esas emisiones afectan al medio ambiente y, en el caso de l'Alfàs del Pi, serían necesarios para contrarrestarlas 59.278 árboles, lo que supondría una masa forestal aproximada de 118,56 hectáreas.

Esta es una de las conclusiones que se extraen del estudio sobre la huella del carbono que se ha hecho en la localidad y que apuntan a que el municipio estaría en camino de lograr mejorar en este sentido. De hecho, en la actualidad, cuenta con 110,20 hectáreas de superficie forestal municipal, estando muy cerca de la superficie necesaria para compensar o neutralizar las 2074,72 toneladas de CO2 calculadas que se emiten.

Pero el cómputo del carbono ha dado más claves. Entre ellas, que las emisiones de gases de efecto invernadero resultantes de la actividad del Ayuntamiento de l'Alfàs están por debajo de la media nacional, según los mismos cálculos.

Esta herramienta de medición del carbono es una herramienta de «trabajo muy valiosa para reducir y mitigar los efectos del cambio climático», según explicó ayer la concejala de Medio ambiente, Rocío Guijarro, en la presentación de las primeras conclusiones del estudio, ante representantes de las asociaciones vecinales: Cuidemos el Albir y We Love Albir; la ONG Rotary Club Internacional de l'Alfàs y el Grupo de Scouts La Cuarta.

El objetivo es reducir esas emisiones derivadas de la actividad municipal, como el uso de la calefacción y climatización o por transporte y consumo energético eléctrico.

Estudio de emisiones

Los datos del estudio sobre la huella de carbono reflejan que las emisiones derivadas de la calefacción y climatización son muy reducidas, suponiendo un 4,57% de las emisiones totales. En cuanto a la flota de vehículos municipales, suponen la segunda fuente de emisiones, con el 6,85%.

En cuanto a las emisiones derivadas del consumo energético, según el mismo estudio, suponen el 88,57% del total. De ahí que se haya decidido apostar por la eficiencia energética con el cambio de 4.000 luminarias públicas, además de otros incluidos en el proyecto de fondos europeos EDUSI.

Con todo, «conseguiremos que el Ayuntamiento de l'Alfàs, en unos años, sea un territorio C02 neutro, con gran calidad de vida», según añadió la concejala Rocío Guijarro.