Bonificaciones fiscales para intentar que la producción de níspero no desaparezca. El Ayuntamiento de Callosa d´en Sarrià reclamará al Gobierno central la reducción permanente del índice de rendimiento neto de los módulos del IRPF de las producciones de este fruto hasta ajustarlo a la realidad del sector. Asimismo, exigirá al Ministerio de Hacienda que, de manera provisional, modifique el sistema de revisión de los módulos de IRPF para evitar que los cálculos tengan en cuenta varios ejercicios fiscales anteriores, y sólo sea contabilizada la última campaña.

La propuesta se elevará al pleno de mañana y que coincide con el inicio de la campaña del níspero. La moción del equipo de gobierno local está basada en un informe elaborado por la Cooperativa Agrícola de Callosa d´en Sarrià, Ruchey.

En la actualidad, los agricultores cotizan a las arcas públicas a través del sistema de estimación objetiva, que establece módulos generales para cada tipo de producción. Un sistema que es revisable de manera circunstancial por causa sobrevenidas.

Según señala el informe aportado por la cooperativa, el sector ha entrado en decadencia y «corre peligro de extinción», ya que en los últimos 18 años la evolución de la producción del cultivo del níspero ha descendido en torno al 44%. Por ello, el documento incide en que se ha de tener en cuenta que el níspero es un fruto que requiere una gran cantidad de mano de obra y mucha especialización en las tareas agrícolas.

Así que «mantener un índice de IRPF del 0,37% actual, es un agravio comparativo con respecto a los demás productos hortofrutícolas, que supone una pérdida de competitividad y el abandono constante del cultivo».

Desde el Ayuntameinto se exige por ello la «reconducción de esta situación para mantener vivo el cultivo por cuestiones de empleo y economía de la comarca, así como por cuestiones paisajísticas y medioambientales». El alcalde, Josep Saval, insistió como en cada campaña que es necesaria una rebaja de al menos el 50% y que tenga un carácter permanente para que no tenga que ser revisada cada año, dados los elevados costes de producción.