Además de cómo están afectando las medidas del Plan de Erradicación del Consell a los campos y los agricultores, el alcalde de Benifato, David Blanes, tiene otra preocupación: que el acuífero del que la localidad bebe se vea afectado por las fumigaciones. Por ello, el Ayuntamiento ha acabado presentando un recurso contencioso en un juzgado de Alicante para solicitar medidas cautelares que paren la fumigación en esa zona.
Pero antes de llegar a eso, la administración local ha intentado preservar esta reserva de agua de otra forma. Primero enviando una carta a la Conselleria de Agricultura en la que se informaba de la existencia de dicho acuífero, conocido como Fonteta del Poble y, por tanto, «qué medidas iban a tomar» en esta zona para luchar contra la Xylella.
Según la documentación a la que ha tenido acceso este diario, desde este departamento se les contestó que «es obligación de los propietarios» tomar esas mediadas y sólo indicaron que se tenía que cumplir la norma europea. Ante esto, el Ayuntamiento decidió acudir a la Conselleria de Sanidad y pedir un informe al área de salud pública, que se emitió en noviembre y que recogía que para «evitar la contaminación de zonas de extracción de agua de consumo humano», se deberá «dejar 50 metros como mínimo sin tratar», entre otras medidas. Además, el Consistorio también solicitó un informe a la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) al respecto.
Finalmente, el informe sanitario se remitió a Agricultura de nuevo pero no recibieron respuesta por lo que, tras presentar un recurso ante el Consell, el Ayuntamiento decidió presentar un contencioso en el juzgado de Alicante para pedir esas medidas cautelares para mantener intacto el acuífero.
