Las inmediaciones de la autopista AP7, a su paso por la Marina Baixa, registró ayer dos incendios de vehículos (con cuatro turismo implicados), algo muy inusual, que obligaron a intervenir a los bomberos del Parque de Benidorm, al tiempo que no causaron problemas de circulación, según la información recabada por este periódico en fuentes oficiales.

El primero de ellos se registró sobre las cuatro de la madrugada en la carretera de pago a la altura del término municipal de Altea por causas que se desconocen. Un aviso al «112» permitió desplazar al lugar dos vehículos de primera salida de los bomberos para extinguir las llamas sin que se registraran heridos, sólo daños materiales. Además, hasta el lugar del siniestro acudió una dotación de la Guardia Civil de Tráfico y un vehículo de apoyo enviado por la mercantil que gestiona la concesionaria de la autopista.

Tras este primer suceso, ayer por la tarde se registró un aparatoso incendio en un aparcamiento junto al peaje de La Vila Joiosa.

Por el momento se desconoce cómo se inició el fuego, que se propagó al menos a dos coches más. El aparcamiento lo utilizan, al parecer, empleados de la concesionaria de la autopista. En este siniestro tampoco hubo que lamentar daños personales ni afectó a la circulación en la AP-7.

Guardia Civil

En un primer momento se desplazaron al lugar tras recibir un aviso las patrullas de servicio de la Guardia Civil de La Vila, que portaban extintores, aunque dada la intensidad de las llamas no se pudo frenar la propagación del fuego que pudo ser extinguido por la dotación del Parque de Bomberos que llegó al lugar pocos instantes después.

El siniestro se originó, al parecer, por algún problema mecánico en uno de los vehículos y, tras coger fuerza el fuego, se propagó con mucha rapidez, alcanzado a otros dos vehículos estacionados. Una grúa trasladó los vehículos calcinados ante la desolación de los propietarios en una jornada festiva que no olvidarán.