Libreta en mano, cámara y con decenas de preguntas preparadas. Así es como una delegación de una decena de japoneses llegó ayer por la tarde a la Heladería Alboraya de La Vila para conocer de primera mano cómo se elabora el agua de cebada, además de otros productos artesanos y típicos de la zona.
Este grupo de nipones, dedicados a elaborar e investigar bebidas en su país, están realizando un tour culinario por varios países de Europa, entre ellos España. Entre los lugares elegidos estuvo La Vila, pero antes habían pasado por Murcia para conocer un dulce típico, el «paparajote» y su viaje terminará en otro lugar de la provincia para probar la paella.
El obrador artesano y familiar donde acudieron ayer elabora este producto típico desde hace décadas con una receta cuyo «secreto» sólo conocen ellos, explicaron desde la heladería. Fue Ramona, la matriarca, quien consiguió el punto exacto de esta bebida después de dos años de pruebas para lograrlo.
Los nipones pudieron ver cómo es el proceso de elaboración y conocer los ingredientes pero no el truco para conseguir ese punto exacto. El encargado de atenderles fue Miguel Ángel Verdú, uno de los hijos quien sigue la tradición familiar y es experto heladero. Fue la Asociación Nacional de Heladeros Artesanos quien se puso en contacto con este negocio local para que recibiera a los visitantes junto con la colaboración del CdT de Alicante.
Una bebida con historia
El agua de cebada procede de la posguerra cuando en La Vila se tomaba «algo parecido», según las mismas fuentes, elaborado con agua, limón y azúcar de caña. A estos ingredientes le añadieron cebada tostada que la convirtió en lo que es ahora, una bebida que incluso toma la reina de Inglaterra, Isabel II, «para mantenerse joven». Los japoneses se mostraron curiosos con la elaboración de este agua y sobre «la razón por la que no se consume más». Además quisieron conocer sus propiedades y los ingredientes que la forman, pero la receta se la guardó Ramona para ella.
Pero también degustaron muchos otros productos como la horchata, la leche merengada o todo tipo de helados. «El que más les ha vuelto locos es el de turrón», afirmaron desde la heladería.
Entre algunas de las curiosidades que los nipones preguntaron a la familia estuvo la de conocer la razón por la que los helados sólo se toman en temporada estival en España. Pero además «se interesaron sobre qué pasa con los trabajadores de este sector el resto del año». La explicación de Verdú sobre que cambiaban el trabajo por el de elaborar turrón para Navidad, les «ha parecido muy sorprendente».
El obrador vilero también es la primera vez que recibía una delegación extranjera para conocer sus productos por lo que se mostraron «contentos y satisfechos» con esta visita.
