«La Vicaría general no autoriza los conciertos porque entran en conflicto con muchos puntos de la normativa diocesana sobre este tipo de actos en iglesias». Esta ha sido la respuesta que el Ateneu d'Historia d'Art ha recibido del cura de la Iglesia de la Asunción de La Vila cuando, como cada año desde hace tres, le han planteado volver a celebrar el Festival de Música Antigua «La Vila del Joy» en el mes de octubre.
Los miembros de esta entidad cultural no entienden que, de repente, en el templo se hayan prohibido los conciertos cuando ese mismo evento se viene celebrando desde 2015. Al parecer, una de las razones sería que no es una actividad con fondo religioso a lo que los organizadores responden: «este año es la edición con más música sacra de todas, con música de varios estilos».
Pero aún hay más. «Una buena parte de los donativos abonados por los asistentes a los conciertos de otros años han sido entregados a la parroquia para la restauración del templo», alega el organizador, Pere Saragossa, como por ejemplo el primer año que se «dio el 100% de lo recaudado».
Por ello no piensan quedarse de brazos cruzados ya que consideran que la decisión no tiene sentido. «Estamos recogiendo firmas para dirigir una carta al Obispado», así como a la Vicaría General, la Conferencia Episcopal, a la Dirección General de Cultura y Patrimonio y al alcalde de La Vila, Andreu Verdú». En ella piden que «las actividades culturales de tipo histórico dentro de los edificios declarados BIC sean regidas, no únicamente por la Iglesia como propietarios del templo, sino coordinadamente y en cooperación con instituciones públicas, como el Ayuntamiento, Diputación y Generalitat, ya que son contribuidores a su mantenimiento y restauración».
La entidad ha hecho pública su cruzada, a la que también se ha sumado la Asociación de vecinos de La Vila Vella,en la página de «change.org», donde ya han reunido 600 firmas en apenas una semana y seguirán en su empeño porque no sólo afecta a la asociación sino «a cualquier vecino de La Vila».
Peligro para la «Carta Pobla»
Pero parece ser que la música no es la única que se va a ver afectada. La representación de la «Carta Pobla», que se celebra en el mes de mayo, sería otra damnificada ya que, al parecer, también se habría informado ya a los organizadores de la misma de que «no se podrá representar el año que viene en la iglesia por la misma normativa». Con todo, la asociación y algunos de los que la apoyan consideran que la iglesia es un BIC y que «deberían poder hacerse actos culturales».
