Además de denunciar los numerosos casos de envenamiento de gatos en la zona, residentes de la calle Entrepinos también criticaron la tardanza de Policía Local y Nacional en retirar el gato que fue ahorcado este fin de semana, a pesar de las múltiples llamadas que realizaron para solicitar su intervención. El animal permaneció, como mínimo, 36 horas colgado del cuello a un olivo con un hilo de pescar: desde el sábado por la noche que lo detectaron los vecinos hasta ayer al mediodía, aunque los afectados no saben cuánto tiempo hacía que estaba allí cuando lo vieron.

Según afirman, la Policía se escudaba en que, al estar en una propiedad privada, necesitaban un permiso judicial para acceder, un trámite que estas fuentes no pudieron concretar si se llegó o no a realizar.