Las obras no se paran. Al menos todas aquellas que se están ejecutando fuera del núcleo festero, cuyo epicentro se emplaza en la zona del Calvari y se extiende por las calles aledañas. Así lo ha decidido el gobierno local popular, que ha aprobado por decreto la continuidad de las obras públicas que se vienen ejecutando en la ciudad de los rascacielos también durante los días grandes de Benidorm. Algo que está limitado, como dicta una ordenanza municipal, en la que se prohíbe los trabajos en vía pública tanto en jornadas festivas, así como en verano o Semana Santa.

No obstante, el hecho de que queden apenas dos meses para que concluya el ejercicio económico y que algunas de las actuaciones se estén ejecutando con cargo al presupuesto de este año ha llevado al edil de Escena Urbana, José Ramón González de Zárate, a dar luz verde a la continuidad de las mismas. Así lo explicó este semana el propio regidor.

Entre las actuaciones que seguirán efectuando se encuentran las obras del nuevo parque de Foietes, los trabajos para llevar la fibra óptica al Rincón de Loix o La Cala y, algunas que se encuentran en plena frontera entre la «zona guiri» y el núcleo festero, como las actuaciones para la mejora del drenaje de aguas pluviales en la calle Orts Llorca. Estas últimas se encuentran a escasos metros de la avenida Mediterráneo, desde donde se disparan las mascletàs. No obstante, el edil de Escena Urbana ha optado por seguir adelante con las mismas. No hay que olvidar que se trata de un proyecto de calado para la ciudad debido a las inundaciones que se producen en esta zona cada vez que se registran fuertes lluvias.

En cambio, los trabajos previstos dentro del plan de accesibilidad vecinal o en el marco de la señalización vial prevista para 2016 se seguirán realizando pero siempre y cuando no traspasen la línea imaginaria que separa el núcleo festero del resto de la ciudad. Estos días, las actuaciones se centrarán en otros puntos de la capital de la Costa Blanca con el fin de garantizar la seguridad de los festeros y vecinos, así como su bienestar.

De hecho, a lo largo de esta misma semana se venían realizando varias actuaciones en puntos céntricos de la ciudad, como en Ruzafa a la altura de la calle La Biga, de las que ya no quedan ni rastro. Tampoco hay ya ni vallas en los accesos al aparcamiento de la avenida l'Aigüera, en la que hasta ayer se estaban realizando diferentes actuaciones.

No será hasta el próximo jueves día 17 cuando se retomen los trabajos a contrarreloj en el casco antiguo de la ciudad, con el fin de cumplir los plazos y llegar a final de año con los deberes hechos sin necesidad de ampliar la ejecución de las mismas. Algo que, a la larga, siempre termina por generar molestias entre los vecinos.