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Benidorm

El Centro Cultural, un proyecto inacabado que sigue ilusionando

Los conservatorios de música y danza, el Consejo Vecinal y los comerciantes se muestran satisfechos ante la reactivación del gran complejo

El Centro Cultural, un proyecto inacabado que sigue ilusionando

Satisfacción e Ilusión. Esta es la primera impresión con la que se han quedado los diferentes agentes sociales de la ciudad a los que afecta directamente la reactivación del proyecto del Centro Cultural de Benidorm.

«Después de tantos años al frente del Conservatorio de Música y con el complejo paralizado había perdido la esperanza, lo dábamos por perdido. Cada vez que pasábamos por allí lamentábamos que estuviera abandonado», explicó José Molla. La falta de espacios donde desarrollar la actividad del conservatorio tanto de música como de danza es un problema crónico para Benidorm. Cuentan con casi 300 y 90 alumnos respectivamente, no sólo de la localidad sino también de los municipios vecinos.

«Nos vamos apañando como podemos. En la mayoría de ocasiones utilizamos el salón de actos del Ayuntamiento, que tiene una capacidad para 200 personas y ni siquiera publicitamos nuestras actividades porque tan sólo con las familias llenamos», puntualiza el director del Conservatorio de Música. Por este motivo, el anuncio de la reactivación de las obras del Centro Cultural, un lustro después de que se hayan paralizado, «es una muy buena noticia», añadió.

El Consell abordará de momento tan sólo la primera fase del proyecto, que incluye el desarrollo de los conservatorios, una cafetería, un aparcamiento y un auditorio con capacidad para 450 personas, lo que supone duplicar el espacio que actualmente se utiliza para los eventos de los conservatorios. Se desarrollaran así 5.000 de los 11.000 metros cuadrados que ocupa hoy el gran complejo. En la segunda fase, que se desarrollará previsiblemente una vez concluya la primera, para la que el Consell estableció la fecha de 2018, se prevía la construcción de un gran auditorio, entre otras instalaciones.

«Estamos muy agradecidos y contentos de que se vuelva a apostar por este proyecto, pero deseamos que se tengan muy en cuenta nuestras necesidades en el momento de abordar el inicio de las obras. El proyecto fue diseñado hace diez o doce años y en este tiempo la enseñanza en los conservatorios ha cambiado muchísimo. Por ejemplo, hoy tenemos la asignatura de orquesta, donde puede asistir 60 o 65 alumnos, con sus instrumentos, y las instalaciones se deben adaptar a este tipo de circunstancias», explicó el director del Conservatorio de Música. Tanto Mollá como la responsable del Conservatorio de Danza, María Jesús Francés, afirmaron que en todo momento se les trasladó la voluntad, por parte de la Generalitat, de contar con ellos para la reanudación del proyecto.

Instalaciones

«Estamos muy satisfechos. Hacía falta, y hace muchos años, para nosotros y para la ciudad», añadió la directora del centro de danza, quien además apuntó que la colaboración debe ser estrecha ya que las disciplinas que se imparten en el conservatorio requieren de unas necesidades técnicas muy específicas que se deben tener en cuenta a la hora del diseño de las instalaciones. Actualmente, el Conservatorio de Danza imparte sus clases en dos aulas en la Plaza de Toros y dos más en el Palau d'Esports.

El Consejo Vecinal, por su parte, también mostró su alegría ante la iniciativa presentada esta semana en la ciudad por el presidente del Consell, Ximo Puig. «Valoramos de forma muy positiva la reactivación de las obras porque viene a colmar en parte las reivindicaciones que hace tiempo realizamos desde el Consejo Vecinal», manifestó el vicepresidente primero de este órgano, Fernando Montes.

La reactivación del proyecto cumple, según detalló el representante vecinal, con una triple demanda de este colectivo. Por un lado la de mejorar la imagen de la escena urbana con la culminación de la fachada de un gran bloque de hormigón abandonado en pleno centro y que había provocado una degradación de la zona; en un segundo lugar, una mejora de las instalaciones para el desarrollo de las enseñanzas de música y danza; y, en tercer lugar, una apuesta por unas instalaciones dignas para Benidorm, para el disfrute de los vecinos y los residentes temporales así como los turistas que visitan la localidad.

«Tenemos 11.000 m2 y habilitará más o menos la mitad, estamos satisfechos pero desde el Consejo Vecinal continuaremos reivindicando el que se termine este proyecto», aseguró Montes.

En la misma línea se manifestó el presidente de la Asociación de Bares, Restaurantes y Cafeterías de Benidorm (Abreca), Javier del Castillo, quien manifestó que el Centro Cultural «es una necesidad para la ciudad, tanto como conservatorio de danza y música y casa del teatro pero también como un elemento positivo para la imagen de Benidorm, ya que no se podía mantener un edificio de estas características abandonado en pleno centro». Del Castillo lamentó que no se vaya a culminar todo el proyecto pero destacó el hecho de contar con un auditorio para 450 personas.

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