Los nuevos contenedores, la ampliación de aceras o los sitios reservados para motos o carga y descarga, entre otros motivos, han acabado prácticamente con 200 plazas de aparcamiento de las calles más céntricas de Benidorm. Así se refleja en el Plan de Estacionamiento Sostenible (PES), un documento vinculado al Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS), con el que se busca llevar a cabo una reformulación de la Ordenanza Reguladora de Aparcamiento (ORA), conocida popularmente como zona azul. Un estudio que, al mismo tiempo, busca poner fin a los problemas que registra la ciudad en lo relativo al aparcamiento.

Pero antes de ahondar en las soluciones, el documento hace un repaso por la situación actual del aparcamiento en las calles de Benidorm y revela que, en algo más de un año, se han llegado a suprimir hasta 200 plazas de una treintena de viales de la capital de la Costa Blanca, entre las que se encuentran Orts Llorca, Pino, Ametlla del Mar o Joan Fuster Zaragoza. Unos sitios que, por su céntrica ubicación, formaban parte de la zona azul y que directamente han desaparecido ante la creación de nuevas zonas de estacionamiento para motocicletas o carga y descarga así como por las obras de ampliación de aceras o la instalación de un mayor número de contenedores de basura, vidrio o papel.

Pero ahí no queda la cosa. El PES, documento que debe servir como hoja de guía al actual gobierno local popular de Benidorm, advierte del déficit de estacionamiento que sufren los vecinos de algunas zonas como el casco histórico y las calles aledañas a la avenida Beniardà, una de las principales vías de acceso a la ciudad. Un problema que, en parte, se agrava con la supresión de decenas de plazas enclavadas en estas áreas.

¿Pagar en Foietes?

Cabe destacar que este plan de acción, que fue presentado esta misma semana ante el consejo asesor de Escena Urbana de Benidorm y que todavía debe someterse a fase de estudio, también recomienda ampliar la zona azul a algunas calles de Benidorm como Maravall, Apolo XI, San Andreu, Tulipanes, Garita, Puig Campana, e incluso en la avenida de Foietes. Si bien, incide en que en este barrio «dada su singularidad, se deberá realizar un estudio específico que proteja al residente, a excepción de la Av. Foietes».

Desde los grupos de la oposición alertaron sobre su temor de que la supresión de plazas que formaban parte de la zona azul haya generado un desequilibrio, al menos en las condiciones de la concesión, que obligue sí o sí a incluir nuevas áreas de estacionamiento como zonas reguladas.

Tanto desde el PSOE como desde Compromís-Los Verdes criticaron la supresión de plazas de aparcamiento pese a que el gobierno local rechazó aprobar una moción de la coalición donde se solicitaba poner en marcha zonas de estacionamiento reservadas para los residentes y zonas mixtas. Una propuesta que fue enmendada por los socialistas para pedir, además, un descuento del 50% en las tarifas a los residentes. Iniciativas que el gobierno local rechazó a la espera de conocer el contenido del PES.

El representante de Compromís-Los Verdes, Josep Bigorra, ensalzó que el PES le da la razón ya que apunta entre las recomendaciones del documento está la de establecer zonas para residentes.