La Guardia Civil de Alicante ha desarticulado en la Marina Baixa uno de los principales puntos de distribución de hachís que abastecía a los pequeños vendedores. En el operativo se ha detenido a un español de 40 años y se le han intervenido 180 kilos de la droga.

Al hombre se le imputa un delito contra la salud pública (tráfico de drogas) y, además de la droga, se le ha incautado una motocicleta utilizada para transportar la droga y dos teléfonos móviles.

Según la Comandancia provincial, ha sido necesario "más de un mes" de vigilancia para lograr su detención. El hombre es un español nacido en Marruecos que se dedicaba al tráfico de drogas en toda la comarca de la Marina Baixa.

Cuando los agentes de Altea lograron interceptarle, circulaba en su motocicleta con un kilogramo de hachís, que estaba cuidadosamente precintado en pastillas de 100 gramos. Estas "pastillas" proveían a los principales distribuidores de la zona.

No obstante, en dos registros practicados los agentes hallaron ocultos en su domicilio, y un garaje que tenía alquilado, 180 kilos de la sustancia estupefaciente. Gran parte se encontraba todavía en grandes fardos, y otra parte distribuida en paquetes más pequeños, lista para su distribución.

Esta operación supone uno de los golpes más duros de los últimos meses para bloquear la distribución de hachís en la provincia. Se ha desactivado así uno de los puntos principales de distribución, que abastecía a los pequeños vendedores, situados en las principales zonas turísticas de la dos marinas.

El hombre, tras ser detenido, ha sido puesto a disposición judicial, siendo decretado su ingreso en prisión.