La población de jabalíes ibéricos de la Comunidad Valenciana, y en concreto de la provincia de Alicante, está en peligro por su hibridación con los cerdos vietnamitas. Un desastre mayor cuando se trata de una especie que cuenta con una de sus mayores purezas genéticas de toda España, según indica el guarda rural, José Gabriel Fernández, que también es técnico forestal y en conservación del medio ambiente. Una de las mayores colonias de esta hibridación, bautizada como «cerdolí», se encuentra en Tárbena.

El origen de este grave desequilibrio ecológico está en el actor estadounidense Bruce Willis. Así lo afirma el guarda rural, que explica que la gente siguió la moda de las películas de Hollywood en las que se veían a los personajes que adoptaban a cerdos vietnamitas como mascotas.

Abandonados por su tamaño

Y es que, según informa Fernández, vecinos de la comarca, «sobre todo la población extranjera, empezó a comprar estos animales, que en un principio no pesan más de 3 ó 4 kilos». El problema vino cuando algunos de estos vendedores hicieron caja entregando cerdos vietnamitas «pig», en lugar de «minipig». Los primeros pueden llegar a alcanzar los 100 kilos, como los cerdos de bellota. Sus dueños no se daban cuenta hasta pasados unos años, cuando ya se habían hecho grandes. Momento en el que decidían abandonarlos porque les era inviable mantenerlos en sus pisos.

En Tárbena se encuentra el foco de toda la provincia, según afirma Fernández. El origen, señala el guarda, está en una granja de burros que da paseos y rutas a turistas por la zona. Allí, los dueños dejaron sueltos a varios ejemplares de cerdos vietnamitas. A pesar de que les obligaron a tenerlos cercados, ya se ha visto «cerdolís» por la localidad y alrededores.

Reproducción del «cerdolí»

El problema está en que el jabalí macho es muy promiscuo y la hembra tiene uno o dos periodos al año, mientras que la hembra de cerdo vietnamita tiene todos los meses. Asimismo, son dos animales que se pueden reproducir hasta la tercera generación, y en la actualidad han encontrado algunos de segunda generación. Como se puede apreciar en las imágenes, en la misma familia hay «cerdolís» de todo tipo. De la madre 100% jabalí, han nacido uno con 70% cerdo vietnamita (izquierda), otro mitad y mitad (centro) y el último, con 70% jabalí (derecha). Asimismo, las camadas de los cerdos vietnamitas son más numerosas que los de los jabalís.

El foco en la actualidad está en Tárbena, pero también se han visto cerdos vietnamitas en diferentes lugares de La Nucía, Altea y Callosa d'en Sarrià. Por el momento, no saben si se ha propagado desde Tárbena o tienen el origen en cada uno de los municipios. Además, Fernández apunta que también han aparecido ejemplares en Alicante y Santa Pola.

Más voraces y sin miedo

Los jabalíes son muy huidizos, con preferencias nocturnas y comen de los cultivos de trigo y grano. Por el contrario, al cerdo vietnamita le da igual comer de día que de noche, y al ser domésticos, no tienen miedo al ser humano. Esta mezcla ha hecho que el «cerdolí» tenga la voracidad del cerdo vietnamita con la inteligencia y bravura del jabalí, alimentándose las 24 horas del día.

Por ello, el guarda rural alerta de que esto va a tener como consecuencia que aumenten el número de accidentes en carretera. Fernández explica que antes cruzaban las vías para ir a los huertos a comer por la noche. Ahora lo hacen a todas horas y sin miedo.

Asimismo, indica que desde Medio Ambiente han dado permiso a las sociedades de cazadores para sacrificar los ejemplares que estén asilvestrados en pro de la supervivencia de la pureza genética y evitar este desastre para la biodiversidad.