Benidorm ha lamentado, en poco más de un año, tres trágicos acontecimientos vinculados con sus actividades deportivas. El 14 de noviembre de 2014 fallecía una niña de 16 años mientras jugaba un partido de baloncesto en el Palau d'Esports de l'Illa de Benidorm, contra el club de básquet de Calp. Solo dos meses después, el 16 de enero, dentro de estas mismas instalaciones, una nadadora profesional de 17 años se desvanecía en el agua y tenía que ser trasladada al Hospital de La Vila de urgencia. Según fuentes municipales, se encuentra en un estado de coma inducido debido a las lesiones que sufrió. La concejal de Deportes y Sanidad, Ana Pellicer, aseguraba ayer que «suponen los tres una gran tristeza teniendo en cuenta además que es gente joven y además sana».