Varios magistrados del Palacio de Justicia de Benidorm denunciaron a este diario que, desde hace mes y medio, tienen estropeada la puerta por la que entran los detenidos. Un acceso que, como en otros juzgados, es el del garaje del edificio, en el que muchos de los trabajadores introducen sus vehículos.
Este grupo de jueces se queja de que la Generalitat, de quien dependen este tipo de actuaciones, no les haya dejado claro cuándo va a reparar esta entrada. Y es que consideran que supone un grave perjuicio para el funcionamiento del juzgado que la gente que llega arrestada acceda por la misma puerta que el resto.
«Entendemos que es peligroso primero por nosotros mismos. Hay que tener en cuenta que entre los juzgados de instrucción y de lo penal recibimos a lo largo de la semana a un considerable número de detenidos, algunos de ellos muy peligrosos. No es nada agradable que se puedan topar en la entrada con uno de los jueces que los ha atendido o con la gente que va habitualmente al Palacio de Justicia a vistas o al registro», indicó uno de estos magistrados, además de detallar que realizaron una reunión de jueces en la que se habló de los riesgos que entraña dicha situación y de la necesidad de la actuación del Consell.
Es más, fuentes vinculadas a la magistratura de Benidorm subrayaron que este tipo de situaciones «pueden dar lugar, incluso, a fugas, ya que muchas veces la Guardia Civil, cuando trae a los arrestados, tiene que cruzar una calle con los mismos».
Por otro lado, también apuntaron que el hecho de que tengan que entrar en el Palacio por la puerta general puede «dañar la imagen de una persona que, quizá, ha sido detenida por un delito menor y tampoco le apetece que todo el mundo que está en ese momento en el juzgado la vea esposada. Resulta, incluso, vejatorio».
Fuentes especializadas en el ámbito judicial subrayaron que la Ley de Enjuiciamiento Criminal no obliga a los juzgados a disponer de este tipo de accesos, pero sí a garantizar la seguridad con los arrestados que entran y salen del edificio. Otro de los aspectos que molestan a estos jueces es que, debido a este percance, tanto ellos como otros funcionarios, tienen que aparcar sus vehículos en la calle.
Las mismas fuentes aseguraron que la obra necesaria para reparar esta puerta es nimia. «Consideramos que no superaría mucho más de 1.000 euros», resaltaron. Sin embargo, dicen que continúan sin obtener una respuesta clara de la Conselleria.
Este diario se puso en contacto con el área de Justicia del Consell, con el fin de obtener su versión sobre esta situación, y no consiguió contestación.
No es la primera vez que estos juzgados reclaman mejoras a los órganos que los gestionan. En otras ocasiones han denunciado saturación de trabajo en algunos de sus departamentos.
