Un turista británico se ahorcó en la madrugada del pasado 23 de octubre en uno de los calabozos de la Comisaría de Benidorm, donde fue encerrado tras ser detenido por un presunto caso de malos tratos, según confirmaron a este diario fuentes de la Policía Nacional. Según las mismas fuentes, este hombre, de 36 años, fue arrestado una hora antes del suceso por agentes de este cuerpo de seguridad. Desde la Policía Nacional indicaron que alrededor de la una de la madrugada de ese día recibieron un aviso de un hotel de Benidorm para que acudieran a actuar en un presunto caso de violencia de género.
Al parecer, según la versión de la Policía, uno de los clientes del establecimiento habría agredido a su pareja sentimental. Fuentes cercanas al caso indicaron que la supuesta víctima habría alertado al personal del hotel para que la socorrieran. Según relataron a este diario, la mujer llamó a centralita y solicitó que alguien la ayudara porque su pareja estaba agresiva. Las fuentes policiales detallaron que al llegar al lugar de los hechos encontraron al turista británico controlado por varios miembros de seguridad del establecimiento y procedieron a su detención, a la que opuso resistencia. Tal y como describieron, el arrestado iba un tanto ebrio y mantenía una actitud violenta. «La mujer, al parecer, presentaba algunas lesiones», destacaron.
«Al llegar a Comisaría se procedió a realizar la tramitación habitual en este tipo de casos y se le encerró en un calabozo a las dos de la madrugada. A las dos y cuarto, en un control rutinario, se descubrió que el detenido había rasgado una de las mantas con el fin de ahorcarse enganchándose a las rejas», relataron estas fuentes.
El fallecido pasaba unos días en Benidorm con su pareja y sus dos hijos. En el hotel donde ocurrieron los hechos, según fuentes cercanas al caso, no se había vivido los días antes ningún tipo de episodio violento con esta persona.
Fuentes de la embajada británica aseguraron a este diario que se han hecho cargo de la familia y que se han puesto en contacto con las autoridades de la zona. Según las fuentes antes citadas, relacionadas con estos hechos, miembros del Consulado inglés en Alicante estuvieron dando apoyo psicológico a los familiares durante todo el fin de semana. El pasado domingo, tanto la mujer como los niños abandonaron el hotel.
Un medio británico, The Bolton News, se hacía eco ayer de la noticia e incluso introducía declaraciones de la pareja del fallecido. La británica, según este artículo, realizaba afirmaciones restando importancia al supuesto episodio violento acontecido con su pareja, como: «Él estaba de vacaciones y pudo llamar la atención porque iba bebido; fue detenido por ruidoso». En la información de este periódico inglés también dice la mujer, en relación al fallecimiento, que «necesitamos respuestas a lo que ha pasado, no me han dicho nada». Incluso, manifiesta que «éramos muy felices».
