«El Club Náutico de Altea está dispuesto a conseguir la concesión administrativa de sus instalaciones cueste lo que cueste», según asegura en un comunicado. El Club ha presentado -tras 15 años con autorizaciones temporales y un gran número de recursos contra ellas- un recurso de casación de unificación de doctrina «para que sea el Tribunal Supremo (TS) el que interprete cómo se debe aplicar la normativa portuaria contenida en la Ley de Puertos estatal y valenciana», añaden desde el club.

Sus dirigentes inciden en que, al igual que la Ley de Puertos del Estado, la Ley de Puertos de la Generalitat Valenciana 2/2014 de ,13 de junio, señala que podrán convocarse concursos en las concesiones de dársenas en instalaciones náutico-deportivas, salvo cuando el solicitante sea un club náutico sin fines lucrativos, siempre que las condiciones de la concesión establezcan como máximo un límite del 20% para el número de atraques destinados a embarcaciones con eslora superior a 12 metros».

El presidente de la entidad, José Román Zurutuza, considera que con esta normativa, el club de Altea «tiene derecho a que se inicie un procedimiento que termine con el otorgamiento de la concesión administrativa sin que se siga con un perpetuo régimen de autorizaciones». Y plantea que el «encadenamiento sucesivo» de autorizaciones y prórrogas desde el año 2000 «va en contra del espíritu» de las normativas estatal y autonómica. «Por ello no es ni lógico ni legal», subrayó. Ya en el contencioso-administrativo contra la última autorización temporal concedida por la Conselleria de Infraestructuras fue desestimado por el TSJCV «porque la administración no había tomado todavía la decisión de iniciar el procedimiento de concesión», explican en el club.

Con el actual recurso ante el TS, la entidad presente que, tras las sucesivas prórrogas, el Tribunal diga «si es el momento adecuado o no para que la administración tome una decisión sobre la renovación de la concesión». Desde el pasado 22 de septiembre, el Club Náutico de Altea ejerce su actividad con la autorización temporal que otorga la Conselleria caducada. La entidad también solicitó a la Generalitat poder acogerse a la disposición transitoria segunda de la Ley 2/2014 de Puertos de la Generalitat, lo que le permitiría seguir explotando las instalaciones náuticas hasta junio de 2017. Al margen de ello, club insistió en que opta a la nueva concesión definitiva del dominio público portuario y que la situación actual le impide «no poder acometer las inversiones necesarias en la mejora de los servicios portuarios en Altea».