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Denuncian la falta de máquinas para preparar las sesiones de quimioterapia

El Hospital Marina Baixa asegura que incluirá en el Plan de Inversiones de 2016 más tecnología

Imagen de la campana que utiliza el hospital. información

La sección del Sindicato de Enfermería (Satse) en el departamento de salud de la Marina Baixa denuncia que la maquinaria del Hospital Comarcal con la que se preparan tratamientos oncológicos es insuficiente para la gran cantidad de demanda que recibe, tras la ampliación del servicio oncológico. Según el sindicato, esto ha provocado que los pacientes deban soportar largos tiempos de espera para recibir una medicación personalizada, que varía en función del estado del enfermo y se prepara el mismo día que se le va a aplicar.

Por ello, para mejorar la atención a los pacientes, el Satse exige a la Conselleria de Sanidad y Salud Pública la dotación de «una nueva campana de flujo laminar vertical», necesaria para la elaboración de tratamientos de quimioterapia.

Desde el Satse indican que el Hospital de La Vila cuenta con dos campanas que permiten controlar la contaminación microbiológica en el aire. Tan sólo una de ellas se dedica a las quimioterapias, aunque no de forma exclusiva, por lo que al cambiar de tratamiento «la máquina necesita estar media hora parada, con aspiración continua, para limpiar el ambiente», explican. En esta línea, señalan que, dadas las peculiaridades del proceso y al sólo contar con una campana viable, el trabajo de los farmacéuticos se ralentiza y aumenta el tiempo de espera de los pacientes. «Hay días que se llegan a preparar hasta 40 tratamientos, por lo que con otra máquina la espera para los pacientes se reduciría a la mitad», añaden las mismas fuentes. Incluso, denuncian que en ocasiones «se ha estropeado y han tenido que traer la medicación desde el Hospital de San Juan o la han suspendido».

Asimismo, el Satse subraya que las campanas «se instalaron hace 10 años, cuando el servicio que daba el hospital era mucho menor y la mayoría de terapias se aplicaban en la Clínica Benidorm».

Por su parte, el Hospital de la Marina Baixa aseguró ayer a este diario que, pese a que «la campana con la que cuenta el centro funciona en condiciones óptimas y garantiza la administración del cien por cien de los tratamientos», la dirección incluirá la petición de dos nuevas campanas de flujo laminar en el Plan de Inversiones para el año 2016. Este aumento de la dotación busca dar respuesta a las nuevas necesidades que han ido surgiendo «al asumir la totalidad de la patología oncológica», reseñaron.

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