Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Benidorm

Los temporales del invierno generan escalones en varios tramos de las playas

Los socorristas advierten del peligro que conllevan para bañistas tanto mayores como niños

Una bañista intenta subir uno de los escalones de Levante. DAVID REVENGA

Los socorristas advierten de que la morfología de las playas de Benidorm ha variado este año. Según explicaron a este diario, cuentan con varios tramos con escalones en la entrada al mar más pronunciados que otros veranos y esto puede suponer un peligro para dos sectores de la población: los mayores, por sus dificultades físicas para sobrepasar el socavón, y para los niños, que pueden pasar de tener el agua por los tobillos a que les cubra por completo. Tal y como explicaron los sanitarios, han llegado incluso a encontrarse a personas con su propia silla de playa en medio del mar «pero claro, no les podemos decir nada porque en realidad no les cubre», explicaron. Uno de los tramos más pronunciados está en la zona de la cala de Benidorm, donde se pasa de tener el agua por los pies, a cubrir casi un metro, y después a que le llegue por las rodillas.

También se han generado charcos en las orillas, donde pequeños y mayores aprovechan para refrescarse y tomar el sol, un acto que los socorristas creen que es peligroso por, entre otros motivos, el paso frecuente de bañistas que pasean recorriéndose la orilla.

El catedrático de Geografía y climatólogo de la Universidad de Alicante, Jorge Olcina, manifestó a este diario que Benidorm tiene «una ubicación privilegiada al tener sus playas resguardadas de los temporales del nordeste y del este, que son los más violentos en la costa mediterránea», pero «no así de los del sur y sureste, que han sido más frecuentes este año». Como posible consecuencia, los aportes de arena que se han producido por efecto de estos oleajes pueden ser los responsables de estos «bancos» y «escalones» que se observan este año, según comentó el profesor. Asimismo, aclaró que, en principio, son fenómenos coyunturales «y lo normal es que la propia deriva marina vaya rehaciendo el perfil de las playas, aunque es un proceso que puede durar meses».

Desde la Concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Benidorm dijeron que esto demostraba que se trata de un entorno natural y vivo. Además, detallaron que durante los meses de temporada baja, no así en verano, mantienen la posidonia del mar «porque son residuos naturales que demuestran la buena calidad del agua y ayudan a formar una barrera física para que no se genere más erosión».

Coincidiendo con la posición del catedrático Jorge Olcina, desde la concejalía manifestaron que en estos casos lo mejor es no intervenir y dejar que sea la propia naturaleza la que actúe porque la intervención del hombre podría tener efectos negativos, por ejemplo, en la flora y la fauna marina de esos puntos.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats