El «trenet» llegó ayer a Dénia 22 minutos más tarde que hace cien años y con bastante menos estrépito. El 11 de junio de 1915, cuando se realizó el primer viaje ferroviario en el tramo Altea-Dénia, en la estación dianense esperaba una multitud indignada. Recibió al convoy con una lluvia de huevos y tomates. Unos 60 guardias civiles vigilaban a los manifestantes, que protestaban por que todos los talleres ferroviarios se habían construido en Alicante y no en Dénia. El comercio de la pasa periclitaba y la ciudad quería engancharse a una nueva locomotora económica. El tren era el progreso.

Cien años después, los alcaldes también se aferran al tren. La nueva consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, María José Salvador, ya constató ayer, en el viaje conmemorativo de los cien años, que el ferrocarril sigue despertando en la Marina voces reivindicativas. El munícipe de Dénia, Vicent Grimalt, del PSPV, recordó que la ciudad llegó a tener dos líneas de tren, la del «trenet» con Alicante y la de Carcaixent y Gandia, cerrada en los años 70. «Pedimos a la consellera que haga todo lo posible para recuperar la conexión directa con Valencia», dijo Grimalt, que incidió en que «hacer realidad» la vía ancha entre Dénia y Gandia «vertebra las comarcas».

Ese proyecto ferroviario se conoce ahora como el Tren de la Costa. El alcalde de Altea, Jaume Llinares, de Compromís, también reclamó ese tren «que conecte Alicante y Valencia por la costa». Asimismo, recordó que la línea que ayer cumplió un siglo, conocida como el «trenet de la Marina», tiene asignaturas pendientes como la de la electrificación. La línea 9 (Benidorm-Dénia) es, de hecho, la hermana pobre del TRAM de Alicante. Los pasajeros tienen que realizar trasbordo en Benidorm y completar el viaje en un tren diesel.

La consellera aseguró que el Tren de la Costa es «un objetivo prioritario» y recalcó que «vertebra el territorio y fomenta el turismo». Pero explicó que ahora la conselleria está realizando «informes y una auditoria sobre su situación económica». «Hemos pedido una reunión con la ministra de Fomento para reivindicar las infraestructuras pendientes. Y el Tren de la Costa es una infraestructura compartida», avanzó.

La consellera también apuntó que conocía «las deficiencias» de la línea entre Benidorm y Dénia, que ahora está inmersa en un plan de modernización cuya primera fase, dotada con 50 millones de euros, debe acabarse en 2020. El alcalde de Altea reveló que el viaducto del Mascarat ya ha superado las pruebas de carga. «El "trenet" lleva cien años pasando por encima de esta obra única», indicó.

Francesc Sabater, que es el jefe de atención al cliente de la Línea 9, afirmó que el «trenet de la Marina» fue el primer tren turístico de España. Calificó la construcción de estas vías de «proeza técnica». En el trazado de este ferrocarril, que supera una orografía muy complicada, trabajaron 1.200 operarios.