El servicio de Urgencias del Hospital Marina Baixa de La Vila Joiosa, uno de los más afectados por el «colapso» que se vive en muchos momentos en este centro sanitario, no se quiere conformar con la negativa que dio el pasado miércoles el conseller de Sanidad, Manuel Llombart, a la construcción de un nuevo bloque.

Los responsables de esta área han decidido elaborar un documento en el que detallan una serie de mejoras como alternativa a la no ampliación, que presentarán directamente al gerente del Hospital Comarcal. «Nuestro objetivo es que quede constancia, por escrito, de que no estamos contentos con el espacio del que disponemos para dar un servicio tan importante como el de Urgencias», reseñaron fuentes de este departamento un día después de escuchar las declaraciones del conseller, en las que decía que «creemos que la estructura que tenemos es la adecuada y la suficiente para hacer frente a las necesidades que precisa este hospital».

Una decisión por parte de la Conselleria que creaba bastante contrariedad entre varios jefes de servicio que sólo un par de meses antes habían sido convocados por la dirección del centro de referencia sanitaria de la Marina Baixa para poner en común propuestas para mejorar el Hospital. Finalmente, las dos seleccionadas y en las que se basó el gerente para elaborar un escrito que remitió a Generalitat, contemplaban la creación de un nuevo edificio, según señalaron a este diario algunos de estos responsables de área que participaron en dichos encuentros.

Por esta razón, los encargados de Urgencias han decidido buscar otros caminos para mejorar un servicio en el que se han visto hasta diez camillas instaladas en los pasillos y a gente más de diez horas en las salas de espera. Entre otras cosas, porque el Hospital Comarcal suele estar muchas veces al límite de su capacidad y es complicado derivar a enfermos que llegan a este servicio a planta.

Entre las medidas que proponen está la de unificar la «zona 4» al resto de la unidad. Cabe recordar que para desatascar un poco el asunto, a principios de enero, habilitaron en Urgencias un espacio que se dedicaba hasta hace poco a aislar casos sospechosos de Ébola. Allí instalaron cuatro boxes en el que podían ubicar hasta nueve pacientes. Lo que quieren que se haga es que, arquitectónicamente, dicha área quede unida al resto, y no existan barreras estructurales de por medio, con el fin de generar un mayor dinamismo. Por otro lado, solicitan que se realicen algunas divisiones en la zona de observación según el tipo de enfermedades, donde actualmente hay instaladas 18 camas. «No es porque exista riesgo de contagio sino por aportar mayor confort a ciertos enfermos que quizá están más delicados», apuntaron fuentes de dicho servicio. Por supuesto, piden también más personal, ya que «los pacientes que nos llegan son mayores y cada vez más críticos, por lo que tenemos que dedicarles mucho tiempo», añadieron

En definitiva, el objetivo de Urgencias es que ni la Gerencia ni el Consell «se queden con el mensaje de que todo va bien», subrayaron.

PSPV: «El conseller miente»

El secretario de Sanidad del PSPV en la Marina Baixa, José Vicente Férriz, indicó que «el conseller sabe que miente cuando asegura que las estructuras de este hospital son suficientes». Férriz se apoya en los informes de los directores de servicio para dar fuerza a su declaración.

Asimismo, anunció que el PSPV-PSOE comarcal presentará una moción en todos los municipios de la Marina Baixa para exigir un aumento de personal en el Hospital y la adecuación de las instalaciones a las necesidades existentes.

También resaltó a este diario que «todo esto me parece una estrategia para tapar el hecho de que las arcas de la Generalitat, en materia de salud, están vacías».