Más espacio para la pirotecnia y más seguridad para el público. El Ayuntamiento de Benidorm ampliará este año el perímetro de protección de las mascletás y otros disparos pirotécnicos previstos en las Fiestas Mayores Patronales, que comienzan el próximo viernes y se prolongarán hasta el miércoles, día 12, con el fin de garantizar la seguridad de los cientos de personas que se congregan para seguirlos en directo. Así lo avanzaron ayer fuentes del departamento municipal de Seguridad, que señalaron que, además de para evitar cualquier incidente, la decisión también responde al incremento de masa explosiva que está previsto que se dispare en las tres mascletás y el castillo de fuegos artificiales, previsto para el miércoles y en el que se alcanzarán los 1.100 kilos de pólvora.
El plan de seguridad diseñado para esta ocasión se divide en dos partes: las mascletás de domingo, lunes y martes; y el castillo de fuegos del miércoles, con el que se pondrá broche a las Fiestas Mayores. Para las primeras, que se disparan los tres días desde la avenida del Mediterráneo y en las que está previsto el encendido de entre 95 y 98 kilogramos de masa explosiva, la Policía Local acotará entre 15 y 20 metros más de seguridad con respecto a otros años, especialmente en la plaza de la Hispanidad, donde se agrupa el mayor número de espectadores. Con esta nueva medida, el público quedará situado a una distancia mínima de 45 metros de la zona en la que se montarán las tracas, morteros y carcasas.
Por lo que respecta al castillo de fuegos del miércoles, en el que está previsto alcanzar 1,1 toneladas de masa explosiva, el Ayuntamiento cerrará desde primera hora de la mañana los accesos al Parque de Elche, que en años anteriores no se había cortado hasta por la noche, cuando se disparan los fuegos. Fuentes del área de Seguridad señalaron ayer que, aunque los cañones y otros materiales para el castillo comienzan a colocarse sobre la arena de la playa de Poniente el lunes, no será hasta el miércoles cuando se colocará la pólvora, de ahí que hasta ese día el perímetro será más reducido. Ya el miércoles, desde primera hora, además de cerrar las entradas al Parque de Elche, también se establecerá sobre la propia arena un radio de seguridad que alcanzará los cien metros durante toda la jornada y se ampliará hasta los 150 horas antes del disparo. Estas fuentes indicaron que, con esta distancia, se cumple la normativa relativa a espectáculos pirotécnicos y, además, consideraron que permitirá asegurar que el público esté a una distancia suficiente ante cualquier incidente o desvío que se pudiera producir.
«Ampliar los cordones supone más trabajo policial, pero siempre va a redundar en mayor seguridad para el público y más lucimiento para los propios espectáculos», indicaron ayer desde el departamento que coordina a la Policía Local. Asimismo, destacaron su intención de que no quede ningún cabo suelto en lo relativo a esta cuestión, sobre todo, tras el accidente ocurrido Burgos el pasado verano, cuando la explosión de un mortero causó varias decenas de heridos durante las fiestas.
