El buen tiempo está acompañando este fin de semana a los peñistas de Benidorm que desde el viernes hasta esta tarde celebran su tradicional «Acampada» festera convocados por la Associació de Penyes Verge del Sofratge. Una cita que, en esta ocasión, ha congregado a cerca de 3.000 personas, según destacó ayer el presidente de la asociación, Jaime González, quien aprovechó la ocasión para destacar el gran esfuerzo y trabajo realizado por todos los peñistas que le acompañan en la Junta Gestora «para que todo salga tan bien como está resultando», además de agradecer la ayuda al Ayuntamiento benidormense y al colectivo peñista por su comportamiento.
La jornada de ayer arrancó a las 10.30 horas con la apertura de las barras en las carpas de l'associació y de la Comisión de Festes y con clases de zumba para los más pequeños. Éstos pudieron así emular a sus progenitores, quienes arrancaron también a ritmo de zumba la acampada tras su inauguración la tarde anterior. Además, los menores disfrutaron durante todo el día con los hinchables que estarán montados hasta hoy y cuya instalación, según destacó el presidente del colectivo, fue minuciosamente revisada anclando los castillos con pesados bloques de hormigón para evitar posibles incidentes como el ocasionado en Alicante hace una semana en el que resultaron herida una veintena de personas. Por otra parte, también para los niños se organizaron talleres de dibujo y baile durante toda la jornada.
Los adultos, tras empezar la barra, dedicaron la mañana a organizar las comidas de convivencia y los concursos y juegos que celebrarían por la tarde algunas de las peñas, como fueron el ya tradicional «beer-pong» para acertar a encestar pelotas de ping pong en jarras de cerveza, un concurso de pasteles y las competiciones deportivas de voley o fútbol. También muchas peñas organizaron sorteos de objetos varios, algunos pensados para sorprender al colectivo infantil.
Por la noche la diversión estaría amenizada por una orquesta hasta altas horas de la madrugada.
Hoy el acto principal de la jornada será el concurso de arroces, tras el cual se iniciará el desmontaje de las carpas para cerrar una acampada a la que finalmente se apuntaron 160 peñas, que ocuparon 187 parcelas del descampado ubicado en la zona de la Cala de Benidorm.
Preparativos y solidaridad
Para el fin de semana de convivencia peñista l'associació de Penyes adquirió cien barriles de 50 litros de cerveza y cincuenta barriles de 30 litros de vino tinto, además de refrescos, para proveer a los miles de peñistas congregados en la cita. La bebida se fue sirviendo durante toda la jornada en la carpa de la asociación, ubicada junto a la de la Comisión de Fiestas Mayores Patronales.
Por otra parte, cabe destacar que por primera vez la acampada tendrá un carácter solidario. Hoy la agrupación local de Cruz Roja Benidorm instalará un punto de recogida de alimentos para que las peñas puedan colaborar con las familias de la ciudad que peor lo están pasando por la crisis. Para ello, voluntarios de esta organización habilitarán una mesa entre las 18 y las 20 horas, coincidiendo con el desmontaje de las carpas de los festeros, en la que podrán depositarse los productos que no hayan sido consumidos durante estos días festivos y que las peñas quieran donar de forma solidaria.
Renombrado de calles
Otra de las novedades más comentada entre los peñistas ha sido la designación de los nombres de las calles dispuestas para el montaje de las carpas. Por primera vez la asociación quiso poner el toque de guasa desde ese primer momento, bautizando la distribución de las calles resultantes de la parcelación del descampado con nombres que recordaban a conocidos viales de Benidorm. Así, la avenida de Martínez Alejos, por ejemplo, inspiró a los peñistas para designar una de sus «avenidas» como «Martinis Añejos», o la de l'Aigüera para la «avinguda de l'Ai- güevos». Entre las calles se podía leer la de «la Birra», «San Ron», «Tomar por Tuño» o el «Passeig de la cagalera».
