Las quejas de los bañistas de Benidorm por, según ellos, la pasividad del Ayuntamiento ante la plaga de medusas que afecta a las playas del municipio pasó ayer del cabreo a la indignación: "si el Ayuntamiento quiere que quitemos las medusas con nuestras manos, que nos pague", aseveró Nicolás Gutiérrez, un turista de Valladolid. "Esto es tercermundista", apostilló Pelayo Rodríguez, un visitante riojano. Los turistas mantienen que el Ayuntamiento ni retira los animalillos marinos muertos de la arena ni tampoco ha habilitado ningún medio para sacarlos del agua.
La intensidad de las quejas de los usuarios de la playas obligó ayer al Ayuntamiento a recular. El concejal de Playas, Vicente Juan Iborra, del Centro Democrático Liberal (CDL), anunció que modificará el horario de las brigadas de limpieza y que los trabajadores estarán a pie de playa retirando de la arena los ejemplares que expulsa el mar o sacan los bañistas. "Si lo que quieren es ver a los operarios retirando las medusas, no hay problema. A partir de las 16 horas de mañana [está tarde para el lector] estarán limpiando la playa", dijo Iborra.
El edil de Playas rechazó las quejas de los bañista respecto a que no se quitan las medusas de la arena. "Las playas se limpian a diario, pero dentro del horario habitual, es decir, cuando los bañistas se han retirado", recalcó el concejal. Iborra insistió en que el barco pelicano del Ayuntamiento recorre el perímetro de costa del municipio para retirar a los animales. El concejal mantuvo su tesis de que la plaga de medusas, al margen de las molestias, no es peligrosa, y que el Consistorio ha activado desde el principio el protocolo antimedusas.
Los turistas, en cambio, seguían ayer inmersos en su particular batalla cuerpo a cuerpo contra la medusas, al tiempo, que se mostraban recelosos a la hora de tomar el baño. "Esto es muy feo y es asqueroso meterse al agua", comentó Conchi, una turista de Ávila a quien los gelatinosos animales marinos no la intimidaban: "acabo de sacar ocho ejemplares del agua", matizó. No todos exhibían el arrojo de Conchi, y otros se mostraban más cautelosos: "da un poco de repelús. Este año esta todo fatal", enfatizó María Belén, de Asturias.
La estrategia preventiva de la Administración cuando se detectan bancos de medusas en alta mar con dirección a la costa es parca en medios humanos y técnicos para combatirlas, y más a partir de 2010 cuando el Ministerio de Medio Ambiente puso fin a la campaña para el estudio, detección y seguimiento de las agregaciones de medusas y residuos en la costa española que comenzó tres años antes.
En la actualidad, el dispositivo se inicia cuando el barco o el helicóptero de Salvamento Marítimo descubre en alta mar un banco de medusa. Este organismo comunica el dato al Ministerio de Medio Ambiente. Y este departamento del Gobierno central traslada el aviso a los gobierno autonómico correspondientes, " ya que esas competencias están delegadas", señalaron desde del Gabinete de prensa del Ministerio.
El órgano competente en la Comunidad Valenciana para esta materia es la Conselleria de Presidencia, Agricultura, Pesca, Alimentación y Agua. Este organismo, según fuentes oficiales, tiene un programa de limpieza del agua de baño que se viene completando con un barco para la retirada de residuos flotantes y medusas en alta mar. La decisión de cerrar las playas al baño es una competencia municipal.
La plaga de medusas que afecta a Benidorm no es exclusiva de este municipio si no que se extiende desde el litoral de Torrevieja hasta el sur de Calp. Los expertos aseguran que los ejemplares que esta recalando son de la especie medusa compás ("chrysaora hysoscella"), de gran tamaño, por la envergadura de sus tentáculos pero menos peligrosos que las pequeñas medusas clavel. La plaga procede del mar de Alborán debido a las corrientes marinas del noreste y vientos del suroeste.
