Benidorm no se quedará descolgada del AVE que procedente de Madrid llegará a Alicante a finales de junio. Representantes de Adif (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias) confirmaron ayer que la nueva zona de aparcamiento en la estación de la capital provincial podrá albergar espacio para que funcionen empresas de transporte con el fin de que los pasajeros de la nueva línea prosigan viaje hasta la ciudad turística. Esto es, las famosas lanzaderas directas que eviten que al llegar a Alicante los usuarios tengan que perder tiempo acudiendo después a la estación de autobuses o del TRAM o gastar demasiado dinero a bordo de un taxi; y que en cambio les posibiliten alcanzar Benidorm en unas tres horas desde su salida en Madrid, dos y media a bordo del AVE y la media restante en un autobús que les estará esperando a la misma puerta de la terminal ferroviaria.

Adif realizó esta promesa después de reunirse por fin con la concejala de Turismo, la liberal Gema Amor, y con el presidente de la patronal hotelera Hosbec, Antonio Mayor. El encuentro, solicitado desde Benidorm, se había hecho esperar en una nueva muestra de la escasa planificación que ha adolecido la llegada del AVE a Alicante, sobre todo si se la compara con la de Valencia, tal y como ya han lamentado empresarios y políticos de la provincia.

Tras el encuentro, Amor matizó que las lanzaderas podrán ser tanto líneas regulares de autobús que coordinarán sus horarios con los del AVE, como microbuses fletados por turoperadores o los propios hoteles. Esto es, para atender tanto a los vecinos de Benidorm como a sus propios turistas. En este sentido, la concejala de Turismo matizó que en una próxima reunión con Renfe se pondrán en la mesa "las frecuencias y horarios de los trenes, que todavía están en fase de estudio". En ese encuentro, también se abordará otra demanda: la posibilidad de colaborar con Adif en materia publicitaria, venta de paquetes y comercialización de Benidorm como destino en las estaciones de Madrid y Alicante.

En los últimos tiempos, el sector turístico no se ha mostrado demasiado optimista con el AVE. Cree que la mayoría del turismo nacional procedente de Madrid y de poblaciones castellanas próximas, y que son mercados emisores claves para Benidorm, seguirán utilizando el vehículo particular. No obstante, tras la reunión de ayer, el presidente de Hosbec, Antonio Mayor, se mostró más optimista: aseguró que con la llegada de la alta velocidad "habrá un antes y un después" especialmente porque servirá "de revulsivo para la llegada de un turismo de mayor poder adquisitivo".

Aún así, también Mayor le pidió más al AVE: aseguró que en la cita con los representantes de Adif se aludió a futuras actuaciones en el trazado de la línea y en este sentido el máximo responsable de los hoteleros abogó por la creación de una "estación o parada previa" a Alicante "con lanzaderas que den servicio al sur y norte de la provincia, evitando así tener que llegar al centro de la capital de la provincia". Esta podría ser también una buena ubicación, según Mayor, para la conexión con el futuro Tren de la Costa. Los hoteleros vuelven así a plantear la necesidad de que Benidorm cuente con una infraestructura ferroviaria directa. Ahora bien, a corto plazo las dificultades son evidentes.