Pese a estar acuciado por las deudas y la caída de ingresos como consecuencia de la crisis, el Ayuntamiento de Benidorm lleva cinco años permitiendo que una empresa privada explote un establecimiento de comida rápida sobre un terreno de titularidad municipal sin pagar por ello contraprestación alguna. Así lo ha puesto en evidencia el Consejo Vecinal de la ciudad, que en su reunión del pasado febrero exigió al gobierno local que inicie las acciones oportunas para recuperar el dominio público de dicho terreno, una parcela pública de 575 metros cuadrados ubicada en la avenida de Jaime I, en la que hay una hamburguesería de la cadena Burger King. La mercantil sigue desarrollando allí su negocio, a pesar de que el suelo debía haber pasado a titularidad pública en el año 2008.

Por partes. El Ayuntamiento de Benidorm es titular de este terreno desde 1997, cuando los antiguos propietarios cedieron el suelo gratuitamente al patrimonio municipal. Entonces, los propietarios se reservaron el usufructo del suelo durante un periodo de diez años, con un uso provisional para bar-restaurante y con la posibilidad de transmitir su uso a terceros, como así fue. El 8 de octubre de aquel año se otorgó el usufructo a una mercantil, cuyo derecho sobre el suelo debía finalizar en septiembre de 2007. Meses después, la junta de gobierno local, entonces bajo signo del PP, otorgó en 1998 licencia de apertura para el local de alimentación, pero advertía que la actividad debería cesar "en el plazo de diez años desde la fecha de otorgamiento de la licencia", en concreto, el 14 de enero del año 2008, según queda constatado en un informe jurídico emitido por técnicos municipales en noviembre de 2007.

En junio de 2010, meses después de la moción de censura y pasados dos años desde el vencimiento del usufructo, el alcalde Agustín Navarro firmó ante notario la escritura pública para incorporar el terreno a la propiedad municipal. Entonces, el exconcejal socialista de Urbanismo, Jaime Llinares, criticó la "dejación de funciones" de los anteriores gobiernos del PP y anunció su intención de "agilizar" los trámites para regularizar la situación en la que la empresa seguía explotando el suelo. Pero esos trámites quedaron paralizados y nada se ha hecho hasta la actualidad.

Propuesta de los vecinos

El pasado febrero, tras constatar estos hechos, el Consejo Vecinal, a través de su comisión de Patrimonio, sometió a debate una propuesta para instar al gobierno local a que recupere de inmediato el dominio público. Pero la propuesta va más allá. Adolfo Valor, uno de los representantes del Consejo, señaló a este diario que la propuesta incluye también reclamar al ejecutivo municipal que exija a la empresa "una compensación por los cinco años que ha ejercido su actividad sin que las arcas públicas percibieran nada a cambio".

A partir de ahí, dentro del propio ente vecinal se ha abierto un debate sobre el futuro del terreno: ¿qué hacer después de que el Ayuntamiento recupere esta titularidad? Mientras que la mayoría de portavoces de asociaciones vecinales abogan por demoler el local donde se ubica el Burger King y hacer un parque o un jardín, otro grupo de consejeros cree que la actividad debería mantenerse pero siempre que la empresa acceda a pagar un canon por ocupar suelo público. Los primeros, según explicó Adolfo Valor, de la asociación del Rincón de Loix, consideran que una zona verde mejoraría la imagen de esta avenida y, además, favorecería la integración urbana del Cementerio viejo, que se encuentra inmediatamente contiguo a la citada parcela. Por su parte, quienes defienden que la empresa pueda mantener su actividad, argumentan que no es el momento de destruir más puestos de trabajo y que, además, el Ayuntamiento podría obtener ingresos extraordinarios que hasta ahora no tenía contemplados, como indicó Juan Calero, de la asociación de vecinos Foietes-Estación.

El Ayuntamiento no mueve ficha

Pese a que el Consejo Vecinal trasladó sus propuestas al gobierno local hace unas semanas, el ejecutivo todavía no ha movido ficha en este asunto. El edil de Patrimonio, Miguel Llorca (CDL), indicó a este diario que "se están estudiando todas las posibilidades", pero reconoció que no se ha iniciado aún ningún trámite para regularizar la situación de la parcela. "La propuesta está ahí y ahora hay que ver cómo se articula", dijo Llorca, quien tampoco se decantó por ninguna de las opciones planteadas por los vecinos.