Las cifras en materia educativa no dejan de preocupar. Los recortes y ajustes que la Conselleria de Educación viene haciendo desde hace un tiempo se traducen en números que, cuanto menos, asombran, como la reducción de más de un 27 por ciento del profesorado interino en las comarcas de la Marina Baixa y la Marina Alta en los últimos dos años, según los datos aportados ayer por la Federación de Trabajadores de la Enseñanza de UGT en la Comunidad Valenciana.

En número absolutos, los colegios e institutos públicos de las dos comarcas de la Marina han perdido más de 250 profesores en los últimos dos cursos escolares, según detallaron desde el sindicato. Pero el tijeretazo en cuanto a personal no acaba ahí y lejos de podernos escandalizar con estas cifras, el colectivo de profesionales de la enseñanza asegura que "lo peor está por venir".

UGT alerta que el próximo año se perderán otros 420 puestos docentes en las dos comarcas, una vez se apliquen los nuevos ajustes anunciados por el Consell en materia educativa. "Esto supondría perder a más del 60 por ciento de los interinos de la Marina Baixa y la Marina Alta", según denunció ayer el secretario comarcal de FETE-UGT, Andreu Verdú. O lo que es lo mismo: "dejar sin trabajo a más de 400 de los 660 docentes interinos" que prestan sus servicios en las dos comarcas, según lamentó el portavoz sindical.

Los drásticos recortes de plantilla denunciados por UGT serían la consecuencia directa de aplicar el aumento de carga lectiva en el horario de los profesores de Secundaria y la eliminación de desdobles y refuerzos en Infantil y Primaria que la Conselleria baraja para el próximo curso. La medida consiste en pasar de 18 a 21 horas lectivas a la semana. Los diferentes colectivos de enseñanza quisieron puntualizar que se trata de horas lectivas, ya que las horas semanales de trabajo son más, pero lo que se hará es "restar profesorado para labores organizativas de cada centro", tales como guardias o actividades extraescolares, con lo que, según alertan, las medidas se van a dejar sentir y mucho en el alumnado y en la calidad de la educación.

Sea como sea, según matizaron desde el sindicato, de aplicarse los recortes se perdería "el 73% del profesorado interino en los institutos de Secundaria", así como "el 40% de los maestros y maestras interinos en las escuelas", afirmó Verdú, quien además mostró su preocupación por una "posible eliminación de grupos de Ciclos Formativos y Bachillerato", es decir, en los tramos de educación secundaria no obligatoria. Los datos se han calculado en base a los 3.970 profesores que trabajan en centros educativos de la Marina Baixa y la Marina Alta actualmente, de los cuales en torno al 20 por ciento son interinos.

Para FETE-UGT, "con estas políticas de recorte y ajuste, será la educación pública quien pague, junto a otros, las políticas autonómicas de despilfarro, derroche, sobrecostes y excesos de los últimos años".

Verdú aseguró que "la Conselleria de Educación intenta desviar la atención, enfrentando a padres y profesores por las actividades extraescolares", ante los problemas para sacarlas adelante con los actuales recortes, y, "en un futuro próximo, cubriendo su deficiente y deficitaria gestión económica con la refinanciación de la deuda a proveedores a través de un crédito ICO, lo que sólo puede significar un balón de oxigeno para la Generalitat", opinó el secretario comarcal.

Verdú insistió en que "el próximo año el recorte va a ser bestial" entre los docentes sin plaza fija. Aunque hasta ahora los recortes ya se han hecho notar entre los interinos (con el estancamiento de las bolsas de trabajo) y sobre todo en las aulas (donde se han ampliado ratios y eliminado desdobles y refuerzos), de los 250 profesores menos con que cuentan los alumnos de las comarcas de la Marina, en torno a un 80 por ciento habría sido absorbido por las jubilaciones. "El próximo año se espera que pueda haber unas cien jubilaciones, entre las dos comarcas, hasta 400 docentes que van a quitar, serán muchos puestos de trabajo menos", apostilló Verdú.

Y las instalaciones educativas, a cola

A la falta de profesores, la supresión de desdobles y refuerzos, el aumento de ratios y los problemas de financiación de los centros, que han llegado a derivar en cortes en el suministro de la calefacción y hasta de la luz, se suman los cientos de alumnos que estudian barracones. Sólo en la Marina Baixa, más de 1.500 estudiantes ocupan aulas prefabricadas. Tres institutos y dos colegios albergan algún barracón y dos colegios de La Vila están íntegramente en prefabricadas.