La oposición del Ayuntamiento de Altea está en bancarrota. El nuevo organigrama político municipal del gobierno PP-Cipal y los recortes de los sueldos de los miembros de la corporación municipal aprobados en el primer pleno de esta legislatura, han puesto contra las cuerdas al grupo municipal socialista y ya han caído sus dos primeras víctimas. Ayer, los cinco ediles socialistas, todos ellos con poderes de gobierno y dedicación exclusiva en la anterior legislatura, comparecieron ante los medios de comunicación para anunciar que dos de ellos, Santiago Ronda y Gema Córcoles, habían presentado su renuncia al acta de concejal.
El portavoz socialista y secretario general del PSOE alteano, Eloy Hidalgo, explicó que la decisión de sus dos compañeros "ha sido muy difícil y muy meditada". Hidalgo remarcó que la dimisión de Ronda y Córcoles "no es signo de ruptura dentro del partido", sino que se debe a motivos "económicos y familiares", y dio a conocer que los miembros de la candidatura que sustituirán a los dos concejales serán Miquel Zaragoza, ex concejal de Turismo y Cultura, y Paqui Crespo, "pues la siguiente en la lista era Patricia Mora, pero no accede al cargo por motivos profesionales y personales". Ahora, hay que esperar al próximo pleno para aceptar la dimisión de los dos ediles y posteriormente se enviará el acuerdo plenario a la Junta Electoral Central para que ésta designe a los dos nuevos ediles socialistas. Hidalgo afirmó que el proceso puede tardar "dos meses, y en este tiempo nuestro grupo lo formarán tres concejales".
Santiago Ronda, ex concejal de Playas, Infraestructuras y Medio Ambiente, afirmó que su renuncia al acta de concejal ha sido una decisión muy difícil a pesar de que "mi familia me ha apoyado para que no abandone el cargo". Ronda señaló que desde que ha empezado la legislatura, "el grupo municipal socialista ha estado acorralado por el PP. Ellos se han repartido los sueldos pero a nosotros nos han dejado una remuneración de menor cuantía y con lo que percibo no puedo mantener a mi familia". El concejal alegó que "tengo que presentar mi dimisión porque el dinero escasea en casa y debo volver a mi trabajo como Policía Local de Altea, que es incompatible con el cargo de concejal", remarcó, al tiempo que agradecía públicamente "la confianza depositada en mí por las personas que votaron al PSOE en estas dos últimas legislaturas".
Por su parte, Gema Córcoles, ex concejala de Servicios Sociales y Sanidad, explicó que su renuncia "es voluntaria, después de meditarlo mucho y poner en un abalanza los pros y contras de esta decisión". Córcoles, que acaba de ser madre por cuarta vez, indicó que se va porque "compatibilizar mi vida personal y familiar con el trabajo. Y la dedicación que se merece el cargo de concejala supone para mi persona una sobrecarga difícil de llevar". La edil añadió que su tercera hija "precisa de un cuidado muy especial ya que padece el síndrome de Charge, y necesita tener continuos controles médicos, además de que pronto va a ser intervenida del corazón. Éste ha sido el punto que mas ha pesado en mi decisión para renunciar al acta de concejal". Córcoles dijo que el grupo municipal socialista "se merece tener personas que dediquen tiempo para llevar a cabo su proyecto y hacer una oposición positiva y constructiva para el beneficio de todos los ciudadanos y ciudadanas de Altea". "Mi renuncia no significa que me desvincule del partido, ya que estaré apoyándolo fervientemente en todo momento", agregó la edil durante su despedida. Y, además dijo: "Seguiré trabajando por los derechos de las personas mas desfavorecidas y destaparé los actos corruptos de los que tenga conocimiento".
